Secciones
Servicios
Destacamos
La resiliencia es la capacidad de adaptación frente a un agente perturbador. R. N. Remen tiene un texto inspirador a este respecto: «La ostra es blanda, tierna y vulnerable. No podría sobrevivir sin el santuario de su concha. Pero las ostras tienen que abrir sus ... conchas para poder 'respirar' agua. A veces, cuando una ostra está respirando, un grano de arena se cuela dentro de la concha y desde ese momento entra a formar parte de su vida. Esos granos de arena provocan dolor, pero la ostra no deja de ser blanda. No se endurece o forma una costra para dejar de sentir.
Continúa confiándose al océano, abriéndose y respirando para vivir. Pero, de alguna manera, genera su propia respuesta. Poco a poco, pacientemente, la ostra envuelve al grano de arena con capas finas y translúcidas, hasta que, con el paso de tiempo, acaba creando algo de mucho valor, justamente en el lugar en que era más vulnerable y donde sentía dolor. Pudiéramos decir que las perlas son las respuestas de las ostras a su sufrimiento. No todas las ostras son capaces de hacerlo. Pero las que lo hacen son mucho más valiosas. Si eres blando y tierno y tienes que vivir en el fondo arenoso del océano, fabricar perlas se convierte en una necesidad para poder vivir bien»
Para convertir nuestras dificultades, heridas y sufrimientos en perlas, hemos de ser conscientes de que ¡no hace falta que resolvamos todos los problemas de nuestro mundo, nosotros solos! Hemos de asumir que lo nuestro es plantar semillas. Somos albañiles, no jefes de obra; operarios en la mies, no el Mesías. Somos profetas de un futuro que no nos pertenece.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.