Sinfonía incompleta de una añeja barriada

El pasado 13 de junio, otorgaron sus premio anual a José Luis López Ayerdi, 'Coque', Arrabalero del Año, y a Carmen Ruiz, Pila de Honor. A aquel, por las enormes carteleras sobre lienzos que pintadas por él se exhibían a la puerta de los cines convirtiendo la entrada en retablos profanos que alentaban la imaginación de los novios invitándoles a entrar a comerse a besos ante la inspiradora complicidad del cinemascope. Y a Carmen por haber sido más que una concejala, una más del barrio, una barriopilera con más agallas que las gallinetas de roca.

Crónicas cuentan que entre el Río de la Pila y el Arrabal hubo una bolera que se anunciaba a la venta en la prensa tardodecimonónica a precio módico. Del pasado al futuro. Osado que es uno, propongo que, a título póstumo, se otorgue el premio del año próximo al periodista Jesús del Campo Zabaleta, 'El Machinero'. Y, que, para pública instrucción y general deleite, se publique y reparta en hoja volandera gratis su socrática aproximación en dos golpes, blanco y tinto, al Río de la Pila.