Bajo los adoquines

Ha salido el tren hacia el 26 de mayo. Revilla sigue subido al suyo y el resto de aspirantes también reclaman un pacto por el ferrocarril. Con diferencias sobre el destino. Un tren sale de Madrid y otro de Bilbao a la misma velocidad electoral ¿en qué legislatura llegarán a Santander? Sospechamos que la solución es infinito, pero nuestros políticos no asumen la derrota.

Nuestra autoridad municipal, por ejemplo, vaticinaba que en Santander no iba a haber ni playa, ni turistas. Pero hubo las dos cosas. Para su notorio incomodo, no salió mal la Semana Santa, así que activaron el plan B: ignorar la realidad. Gema Igual se retrató paseando descalza por la arena proclamando que no la había, mientras caminaba sobre ella, sobre un descomunal oxímoron.

No es la única rueda de molino con la que nos hacen comulgar. A la Guardia Civil –nos informan, con desconcertante ausencia de concordancia semántica– les han 'renovado' las armas con modelos más 'viejos'. Como Renfe con los trenes. Renovar, en esta nueva acepción del disimulo, es simplemente ir a peor.

La foto de la arena vale más que las mil palabras con las que tratan de convencernos de que la alcaldesa pisa adoquines. Aunque debajo –glorioso mayo– clame un murmullo, como primavera de rebeldes margaritas, golpeando contra un muro de piedra.