La bolsa del populismo

Tomemos el ejemplo de los dirigentes en Gran Bretaña, Johnson acaba de certificar que aumentará su poder nuclear, no solo apoyó y logró el nefasto 'Brexit', sino que para darse un espaldarazo aumenta su arsenal nuclear desde 180 ojivas a 260. Semejante arbitrariedad sin límites le otorga el mismo protagonismo que pretende Irán, país agresivo donde los haya. No solo no reconoce sus errores en el 'Brexit', sino que se reafirma en su postura primera con Reino Unido imponiendo un criterio selectivo de posesión de más poder disuasorio. No, este tipo humano nunca debería tener el poder que se arroga en sus nefastas decisiones políticas. El resultado es el que vemos, un país en depresión, aislado y anacrónicamente imperial.

Cómo arbitrar iniciativas que lleven a los organismos mundiales a revisar las consecuencias nefastas del vasto ejercicio democrático de hoy día, para extender el manto de la democracia y eliminar los poderes personales en el mundo de las naciones, es una cuestión que nos compete a todos. Pero hay que pronunciarse y manifestarse en el sentido de la colegiación para aunar esfuerzos que conlleven a un cambio en las consecuencias y el enfoque del actual modelo democrático. Mahatma Gandhi, con una voluntad de hierro y en una actitud irrenunciable de protesta sin violencia, llevó a la India a la independencia. Con ello quiero traer aquí modelos que pueden usarse para cambiar de una vez por todas el actual, que es democrático personalista, y estoy seguro de que los vanidosos que puedan leer esto tirarán este escrito al basurero, porque sus ambiciones pueden morir aquí, con las premisas que postulamos. Pero habrá otros muchos que se estremezcan y pregunten si en realidad están capacitados para tomar las decisiones que su poder les arroga o están temerosos de agotar la miel en los labios.

La tolerancia no es una inclinación, es el postrero recurso para alcanzar metas participadas, en equilibrio, y no las que nos traen el uso y el abuso del personalismo con el deterioro de las relaciones y la presencia de la hambruna, la pelea, la guerra, el enfrentamiento, el caciquismo o el despotismo. La historia está plagada de personalismos aciagos, guerras incruentas producidas por la tiranía y el poder absoluto. Ello nos debe de servir de ejemplo de lo que tenemos que cambiar para un concurso mundial más equilibrado, racional y progresista. Debemos promocionar ideas de equilibrio y mesura, de esfuerzo y racionalidad, de pelea por intereses comunes que redunden en un mundo en equilibrio y próspero para todos.

Las fronteras de la actual Unión Europea están llevando al 'Brexit' a un callejón sin salida, miremos lo que ocurre ahora en la recién creada frontera entre las Irlandas o la ambigua situación de Gibraltar ante la pregunta de si está dentro de la Unión o dentro de Reino Unido. Probablemente alguien piense que la actual frontera provocará una disolución de Gibraltar en territorio español, ya que el deseo de los gibraltareños es mantener las fronteras con España abiertas para canalizar el recíproco tránsito laboral, de mercancías y turístico. Pero para dejar las cosas en su sitio, el abanderado del 'Brexit', primer ministro Johnson, no puede permanecer callado y postula una pronta presencia de los barcos nucleares en cualquier territorio de ultramar ostentando la bandera imperial, con una inversión multimillonaria en barcos y armas nucleares. Esto es más de lo mismo: populismo, populismo...