Borrar

Se marchan de nuestra vida y ni siquiera nos damos cuenta de ello. Nos han acompañado décadas salpicando el paisaje de nuestras ciudades, hemos hecho ... colas en sus puertas y nos han tragado muchas monedas a cambio de voces con buenas y malas noticias. En algunos lugares como Londres, donde forman parte de un mobiliario urbano rojo y singular, se ha tenido la sensibilidad de convertirlas en bookcrossing, puntos de información, centros de arte, puestos de flores…

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes La cabina