El cáncer de mama estaba antes del covid y sigue aquí

Convencidas de que vacunarse es la mejor manera de ser solidarias, hemos apoyado las estrategias de vacunación frente al covid-19 y apoyaremos las decisiones que los expertos aconsejen sobre futuras fases de la vacunación.

Nos hemos sentido orgullosas de la eficacia de la sanidad pública desarrollando la campaña de vacunación y hemos comprobado la respuesta positiva de la mayoría de la población para conseguir los mayores niveles de inmunización. Lamentamos los discursos que niegan la eficacia de la vacunas.

Defendemos los programas de detección precoz gestionados por el sistema público de salud, con acceso gratuito y continuados en el tiempo, dotados de personal formado y de los recursos necesarios, con controles de calidad. Los responsables de estos programas seguirán trabajando para superar incidencias y retrasos ocasionados por la pandemia.

El covid-19 ha dificultado el acceso de algunos pacientes a determinados medicamentos innovadores en España. No podemos obviar que la innovación farmacéutica hace posible el avance en el abordaje de patologías graves y prevalentes. Esos retrasos impactan negativamente en los pacientes, en la prescripción médica y en la industria farmacéutica. Sería deseable que el Ministerio de Sanidad simplificara los trámites o flexibilizara las evaluaciones, sin que ello suponga relajar las exigencias, para agilizar los periodos desde la autorización de los fármacos por la Agencia Europea del Medicamento hasta su disponibilidad para los pacientes.

Las previsiones de inversión en tecnología sanitaria deben incluir su incorporación en la Atención Primaria, en la aplicación de las políticas de detección precoz de las enfermedades, en la interrelación de las políticas sanitarias y las políticas sociales y para dotarnos de registros poblacionales homogéneos y actualizados de cáncer.

En el abordaje del cáncer de mama se debe atender a un problema sanitario y a la dimensión social que se deriva de la enfermedad oncológica. La equidad debe seguir siendo un principio estratégico de nuestro Sistema Nacional de Salud, donde los servicios y prestaciones sean homogéneos. No es equitativo un sistema donde se manifiestan diferencias entre las comunidades autónomas.

Nuestra Asociación para la Ayuda a las Mujeres con Cáncer de Mama (Amuccam) siempre se ha manifestado sensible ante el cáncer de mama metastásico, que ocasiona necesidades complejas a las pacientes en su vida personal, familiar y profesional. La investigación y la innovación en oncología, que han hecho posible que no consideremos al cáncer como una enfermedad monolítica o inflexible, definirán el futuro del cáncer de mama metastásico y harán posible un mejor control de la enfermedad. El mayor conocimiento molecular y genético, la medicina de precisión en definitiva, ha favorecido mejores tratamientos y mejor calidad de vida de las pacientes.

Agradecemos el esfuerzo de los responsables de los cuidados paliativos, cuyo objetivo es atender efectos secundarios provocados por la enfermedad o por los tratamientos, y trabajamos en la atención a los supervivientes de larga duración desde la perspectiva sanitaria y social.

Las mujeres con cáncer de mama en todas sus fases manifestamos satisfacción por las inversiones previstas en salud y sanidad, en el sector farmacéutico y en empresas especializadas en biotecnología para la salud previstas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, porque contribuirán a la creación de empleo, a fortalecer la economía del conocimiento, a desarrollar empresas sostenibles y a impulsar un sector industrial farmacéutico competitivo.

Necesitamos un pacto por la sostenibilidad, la cohesión y la calidad del Sistema Nacional de Salud, incluyendo la participación del movimiento asociativo de pacientes.

Hoy, Día Internacional del Cáncer de Mama, apoyamos una sanidad pública, de calidad, universal y gratuita, como un elemento básico de cohesión social e igualdad y reclamamos que se reconozca al movimiento asociativo de mujeres-pacientes su contribución a superar los efectos de una crisis social, sanitaria, educativa y económica, con sus ideas, actividades y compromiso.

Seguiremos unidas y mantendremos nuestras reivindicaciones y compromiso desde el recuerdo solidario con todas aquellas que vivieron con miedos e incertidumbres, pero que jamás renunciaron a ser ellas mismas.