Secciones
Servicios
Destacamos
Desde que comenzó la pandemia, la búsqueda de un remedio contra el coronavirus ha seguido dos vías principales: el desarrollo de vacunas, y la búsqueda de un tratamiento efectivo entre fármacos ya aprobados para otros usos. Aunque no se haya descartado, el ... diseño de un fármaco específico contra un virus es una carrera de muy largo recorrido, y los avances por ese camino tardarán todavía mucho tiempo en llegar.
Los fármacos ya aprobados tienen la ventaja de que ya han superado las fases de ensayos clínicos y tienen un perfil de seguridad conocido, por lo que los ensayos que se realizan ahora se pueden limitar a comprobar su efectividad frente al coronavirus. Hemos asistido durante todos estos meses a la promoción de fármacos que parecían muy prometedores y se han quedado en nada, los mejores ejemplos son la hidroxicloroquina y el remdesivir; con algún éxito aislado, básicamente la dexametasona. Siguen surgiendo candidatos, porque encontrar un tratamiento seguro, efectivo y, a ser posible, barato, sería la panacea en la lucha contra esta enfermedad.
El último medicamento que ocupa espacio en la prensa es la colchicina, un antinflamatorio extraído del azafrán silvestre que ha sido la piedra angular en el tratamiento contra la gota durante mucho tiempo. Tanto, que el uso del azafrán silvestre contra la hinchazón viene recogido en el papiro Ebers, un texto egipcio redactado en torno al 1500 a. C. que se conserva actualmente en la biblioteca universitaria de Leipzig. Se sabe que Benjamin Franklin, que padecía de gota, introdujo el tratamiento con azafrán silvestre en los Estados Unidos.
Los resultados preliminares de un ensayo internacional realizado con más de 4.000 voluntarios, confirmados de covid y con algún factor de riesgo asociado, sugieren que la colchicina, administrada muy pronto a pacientes recién diagnosticados, reduce un 25% las hospitalizaciones. Otros resultados, también provisionales y con un número menor de pacientes, encuentran que también parece recortar un 50% la necesidad de ventilación mecánica y un 44% las muertes por covid. Hay que tomar estos datos con cautela, ya que están todavía pendientes de revisión, pero resulta muy prometedor: es un medicamento seguro, el tratamiento mensual cuesta unos tres euros y se administra de forma oral, no necesita personal formado para aplicar el tratamiento.
La hipótesis de los investigadores es que su actividad antinflamatoria controla la tormenta de citoquinas, la reacción desbocada del sistema inmune que aparece en algunos pacientes con covid y puede ser letal. Hay varios ensayos clínicos en marcha para estudiar la colchicina, nueve de ellos en España, aunque otros, como uno del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, se han quedado en el dique seco por falta de voluntarios.
Aunque estamos ante un medicamento muy seguro, nadie debe caer en la tentación de automedicarse. Para empezar, porque los datos siguen siendo provisionales, habrá que esperar que la comunidad científica confirme los resultados y que las autoridades aprueben el uso. Segundo, no es un fármaco preventivo, tomar colchicina no va a mantenernos a salvo de los contagios. Además, no es inocua, sin ir más lejos, la venta de semillas de azafrán silvestre está muy restringida debido a su toxicidad.
Con este virus ya nos hemos llevado más de un chasco, así que lo mejor es mantener la prudencia y la paciencia; y si tomamos la colchicina, que sea bajo supervisión médica.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.