Secciones
Servicios
Destacamos
La Ley de Vivienda, que entró en vigor el 26 de mayo del pasado año, no ha conseguido normalizar el complejo problema de la vivienda, ni conciliar los intereses de los propietarios y los usuarios que ven cada vez más arduo acceder a una casa ... por los altos precios y la baja oferta en el mercado. Poco más de un año después de su aprobación, la ley que reconoce el derecho a la vivienda, que interviene y regula el mercado del alquiler, modifica el concepto de grandes tenedores, amplía las zonas tensionadas e implementa nuevas medidas frente a los desahucios, entre otras normas, no ha logrado solucionar uno de los problemas que más preocupa a la opinión pública. Mientras el Gobierno aboga por un mayor control de los precios de alquiler, por ampliar las ayudas a la primera vivienda o incrementar la oferta, la dura realidad es que en 2024 la oferta inmobiliaria ha caído un 30% desde el 2020. Los pisos en el mercado de alquiler se han ampliado, pero no en el alquiler tradicional, sino en el turístico, más rentable para el propietario, y que eleva el nivel de los precios y tiene un impacto adverso en la convivencia vecinal.
La regulación más estricta de los precios del alquiler es una herramienta que funciona únicamente a corto plazo. A la larga, provoca el efecto contrario y ahuyenta a los caseros desestabilizando el mercado y generando desconfianza. En cuanto a las ayudas públicas a jóvenes para la compra o el alquiler, han acabado trasladándose a los propietarios en forma de subida de precios. Ante los inconvenientes detectados en la implementación de la ley, el Gobierno, que este jueves acusó, a través de la ministra Isabel Rodríguez, de no usar la Ley de Vivienda para frenar las subidas de los precios del alquiler e incluso las amenazó con quitarles fondos, se muestra partidario de reformar algunos aspectos con el propósito de aplicar medidas diferentes según territorios. Pero más allá de retoques puntuales a la legislación sería esencial flexibilizar la legislación relacionada con la promoción inmobiliaria para multiplicar el parque de la vivienda pública.
En este capítulo España está a la cola de Europa con un 2,5% mientras que en Francia representa el 16% y la media europea se acerca al 10%. En el terreno del alquiler hay que tener presente que el 95% de la oferta está en manos particulares por lo que ofrecer a los propietarios seguridad jurídica y las máximas garantías frente a los abusos, es un requerimiento obligado para animar el sector.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.