El efecto taoísta

Este palmarés familiar seguramente añade canas al semblante de Felipe VI, cuyo tío Constantino, que causó la derrota de la monarquía helena en un referéndum, ha debido trasladarse del Peloponeso a Atenas por razones médicas. El verdadero manual de resiliencia es el 'felipino'. El matrimonio que se le censuró por plebeyismo es ahora, precisamente, debilidad convertida en fortaleza, o por efecto taoísta (filosofía china dada a las paradojas) o como signo de que no queda más escudo que una almohada.

En esto pensarían algunos manifestantes del Jueves Santo por Santander que recordaban la Segunda República, sin duda anhelando una Tercera y hasta una Décimo tercera, como las copas del Madrid. Por los casos del Consejo del Poder Judicial, la Fiscalía General, el Defensor del Pueblo, director de RTVE y otros cargos institucionales tenemos clarísima la capacidad de los españoles para elegir servidores públicos sin sectarismos. Y esa noble virtud brillaría prístina en la elección de Presidente de la República. ¿Quién osa dudarlo? Vale, también fallecieron en exilio presidentes de república ... Lo raro en España, desde 1789, ha sido que el Jefe no muera por ahí, como un Káiser cualquiera.

Francia republicana tiembla porque puede recibir de jefa del Estado a una nacionalista radical, 'patita' de Putin que diría el peruano. Con una monarquía peligrarían algunos elefantes de Botswana, amenaza desoladora, pero no millones de europeos, como usted. Va a ser verdad esto del taoísmo. El próximo domingo me lo cuentan.