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La adquisición y entrega de 133 tabletas, por parte de la concejala de Educación, Izaskun Sarabia, a los centros educativos de Laredo, nos parece un acto que responde a una necesidad que tienen los escolares, ya sea como consecuencia del covid-19 o como proyecto ... de innovación educativa.
Tristemente continúan cerrando aulas por causa de la epidemia. Hace días podíamos leer que teníamos trece aulas cerradas, doce correspondían a Educación Infantil y Primaria. Disponer de una tableta es un estímulo para mantener la motivación en el proceso de aprendizaje desde casa y evolucionar hacia el conocimiento metacognitivo.
Si resaltamos la noticia es porque, con frecuencia, solemos escuchar que «la educación no es competencia del Ayuntamiento» cuando se habla de temas y necesidades educativas planteadas por los centros escolares. En esta ocasión la respuesta de la concejala, después de escuchar a los centros, la consideramos ejemplar: gastar 14.000 euros en comprar 133 tabletas. Buena gestión en la compra, teniendo en cuenta la relación precio-calidad, y nunca mejor empleados los dineros públicos.
Entiendo que la señora Sarabia no se planteó si era competencia suya o no lo era, sino que vio claramente la necesidad de emitir una respuesta a corto plazo y actuó. ¿Será una casualidad que la mencionada concejala sea Pedagoga y Doctora en Educación?
Los ayuntamientos, como institución muy cercana a los ciudadanos, tienen la responsabilidad de buscar fórmulas para responder lo más rápido y eficazmente posible a los temas que son pilares básicos en la sociedad, como es el caso de la educación y la sanidad.
La modernización y prosperidad de cualquier población pasa por dominar las nuevas tecnologías. Los centros educativos no pueden estar de espaldas a la realidad actual sin correr el riesgo de continuar formando analfabetos tecnológicos.
En este proceso de actualización tecnológica sería deseable la colaboración de empresas locales, entidades financieras..., con los ayuntamientos mediante la donación del material (tabletas y ordenadores) necesario. Ya que a la larga ellos serán los beneficiados al tener trabajadores con buena preparación en el ámbito digital.
No es cuestión de esperar, estamos en una sociedad de cambios rapidísimos y todo lo que no sea avanzar, significa retroceder. Educación más innovación más investigación es igual a desarrollo y prosperidad. Una actuación como la realizada por la concejalía de Educación en Laredo debería ser causa de reflexión para el resto de los ayuntamientos de Cantabria.
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