Secciones
Servicios
Destacamos
Rosa Inés García Afiliada al PSOE
Ora pro nobis Deus. Ruega por nosotros Kairós, dios de la paciencia, mientras esperamos la concordia. Escribo pensando en Europa, el mejor espacio de libertad y progreso jamás construido. Siento ira y tristeza por el siniestro auge de la ultraderecha tan alejado de las raíces ... democristianas de sus padres fundadores. Estremece ver cómo han votado alemanes, austriacos ¿no tienen memoria? y miles de jóvenes seducidos por falsos profetas.
El Papa pidió a los cristianos rezar «el Santo rosario por la Paz» ante la invasión de Ucrania. Los ultras Alvise y Abascal enviaron mercaderes de odio, camándula en mano, a desgranar sus cuentas ante el Partido Socialista. Y la católica presidenta Ayuso endemonia al líder popular sin piedad, premiando al que satanizó al Papa. ¿Responde a valores cristianos este falsario? ¿Dónde dejan «la dimensión pública y política de la caridad y la concordia cívica que muestra el vigor de la Iglesia»? (A. Domingo, cátedra de Filosofía Moral y Política de la UV).
El Vaticano ante el derecho de asilo propone «solidaridad con los necesitados y ofrecer al que viene lo que desearíamos que nos den si vamos». Los ultras focalizan su discurso contra la inmigración, mancillando al buen samaritano y el papel apostólico de la Iglesia.
Frente a victorias morales artificiales, espiritualidades falsas que vitaminan nostalgias de la nada y políticas banales de lo público ¡qué siga la fiesta de 1978, qué sigan bailando a la par generosidad y renuncias, y qué brinden juntos tolerancia y derechos individuales para recuperar la concordia perdida!
Creyentes o no, hagamos caso al Papa, mensajero universal de la Paz.
María Luisa Sanjuán Exconcejal del Ciudadanos
Reconozcamos que la rebelión de las monjas de Belorado supera con creces cualquier guion de Almodovar, Los Javis o Paolo Sorrentino.
A la numantina resistencia de las sores a franquear el paso a su convento a quienes pretenden fiscalizar sus cocinas y contabilidades, se unen dos personajes atrabiliarios que dicen prestar cobertura espiritual a las hermanas en nombre de una tal Pía Unión que considera que ningún Papa desde Pío XII tiene legitimidad. El falso obispo que se autodenomina ilustrísimo, reverendísimo y pariente de Franco, aparece en redes sociales en entornos lujosos donde no faltan doncellas con cofia y mayordomos uniformados. La otra guinda del esperpento es un falso cura (exbarman) que con el mismo desparpajo hace de portavoz mediático o prepara un Manhattan Terremoto. Parece que el rosario que se reza en ese convento lleva en sus cuentas las de los misterios 'dolosos' de una secta adornada de negocio inmobiliario.
Puede que la organización secreta El Yunque no sea ajena a estos movimientos en el seno de la iglesia católica, incluidos los 'rosarios de la aurora' organizados en Ferraz por la extrema derecha hace bien poco. O a esos curas que en un videochat reconocen rezar para que el Papa Francisco vaya pronto al cielo.
Describe la Biblia que las trompetas del fin del mundo anunciarán guerras, desastres de la naturaleza, enfermedades y pandemias. Algo nos suena.
De la manipulación de la verdad en un mundo hiper informado dice mucho que 400.000 españoles estén captados por sectas. Ya lo expresa el libro del Apocalipsis: «Muchos falsos profetas se levantarán y engañarán a muchos» (Mateo: 24:11).
María Luisa Peón Afiliada del PP
Amén o vade retro. Estas son las posiciones que nuestro mundo polarizado contempla para dos hechos recientes que han llevado a la Iglesia Católica a periódicos, programas de entretenimiento y redes sociales.
El peculiar y sedevacantista obispo de Belorado junto a las monjas clarisas que le veneran y el rezo del Rosario ante la sede de Ferraz con el propósito de frenar la amnistía (emoticono de una carita con los ojos bien abiertos) tienen partidarios y detractores. O mejor decir partidarios y mofadores, porque no hay mejor munición para los detractores de la Iglesia que estos episodios frikis, carne de meme, para que discurra la burla y mediante un razonamiento inductivo concluir que la Iglesia es grotesca, excéntrica, extemporánea.
Nadie más perjudicado por estos personajes que los católicos que viven la religión desde la moderación y el respeto y que se ven –nos vemos– en la tesitura de defender una Iglesia que procura adecuarse a la sociedad y a su tiempo.
Y qué mejor que este circo, que entretiene al personal, para quienes tratan de imponer amnistía y financiación privilegiada, de tapar corrupciones y corruptelas, no quieren que se hable de investigadas y filtradores, nos anuncian regeneración –degeneración– democrática vía control de los medios (censura) y quieren recortar los derechos de la oposición (impedir la alternativa)
Mejor la Constitución y el Estado de Derecho para combatir la amnistía; mejor las herramientas de los hombres que dejar la cuestión en manos de Dios, que bastante tendrá el pobre con tratar de resolver otros imposibles asuntos.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.