Como se entere Will Smith...

Qué leñazos estamos recibiendo y cómo los encajamos. Como Chris Rock, tambaleándose, pero con entereza, como si aquí no pasara nada. Con una gran diferencia, que sí que pasa. Claro que pasa. Aquí los golpes no son físicos, no te ponen la cara colorada, pero hacen daño, mucho. Tortazos que se escriben en mayúsculas y con iniciales (IPC), con tasas que no se alcanzaban desde hace 37 años. Cómo no vamos a hablar esta semana de guantazos cuando la inflación ha crecido este año casi el doble que los salarios de los cántabros, cuando sólo un 11% de los trabajadores tiene su convenio actualizado con una subida medida del 4,9% frente a un alza del IPC del 9,8%. Cómo no vamos a hablar de tortazos cuando el viernes hacíamos cola en las gasolineras para llenar el depósito como si nos hubiese tocado la lotería con los 20 céntimos de descuento.

¡Qué sopapos nos dan! Con el combustible, con la luz, con el gas, con la vivienda, con los alimentos. Y ahí estamos encajando las bofetadas como Chris Rock, aunque nosotros no hagamos chistes. Para eso ya están otros. ¿O acaso no es para partirse de risa que con la que está cayendo alguien nos venda ahora un tren a Bilbao de 2.025 millones de euros? Como se entere Will Smith...