Borrar

Esferas y pasillos

Una sociedad es un vasto sistema de intercomunicación. Si empiezan a generalizarse los círculos ensimismados, el daño puede ser irreparable.

Sábado, 9 de marzo 2019, 14:31

Estuve a un tris de perderme la exposición de la donostiarra Cristina Iglesias en el Centro Botín, pero afortunadamente el ejercicio físico me llevó hasta el mental justo a tiempo. Había venido leyendo en los últimos días 'Historia y futuro', de la filósofa ... húngara Agnes Heller. Esta venerable mujer cumplirá los 90 en mayo. Nacida en una familia judía de Budapest, su padre fue deportado a Auschwitz, donde murió. Después de la Segunda Guerra Mundial escuchó al filósofo marxista György Lukács y se hizo comunista. Pero el devenir de la Hungría estalinista y el rebrote de antisemitismo en pleno comunismo llevaron a Agnes y a su marido, Ferenc Fehér, a huir en 1977 a Australia. De allí se trasladaron más tarde a la New School en Nueva York, donde se confirmó como una de las grandes pensadoras sociales de nuestro tiempo. Por el camino dejó de ser marxista y se hizo socialdemócrata con fuerte tono liberal. Pues la Ilustración tiene defectos, pero no tantos como las demás opciones.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes Esferas y pasillos