Espere sentado

Mientras, leo a la viróloga Margarita del Val decir que «en dos semanas, en dos meses o en dos años todos nos infectaremos de covid», y eso ya me preocupa más porque suele ser muy fiable. Así que a esperar cuándo me contagio, si en dos semanas, en dos meses o en dos años.

Aunque para espera la de la alcaldesa de Santander que todavía se pregunta por qué nadie del Gobierno de Cantabria acudió a su fiesta en Puertochico con el discurso patrio - y largo- que había preparado para la ocasión. Por cierto, las mil personas que acudieron al izado de la bandera aún esperan a que alguien explique qué tipo de «amenaza» obligó a suspender el desfile de la Guardia Civil.

Y ya que hablamos de espera, hay una palabra que puede hacer de sinónimo en Cantabria: Presupuestos. Aquí sí hace falta un máster de paciencia. Cojan ustedes las Cuentas de otros años, comparen y no desesperen: tren a Madrid, el tercer carril, el soterramiento de Torrelavega... Y ahora escuchen a todos los partidos, los que apoyan al Gobierno central y los que están en la oposición, y hagan el mismo ejercicio: comparen y no desesperen. Y ahora pregúntense si acabarán viendo alguna de esas grandes obras de las que se habla. Y si usted es optimista por naturaleza, ya sólo tiene que esperar. Espere sentado, mejor.