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Vivimos hipnotizados por las pantallas luminosas. Yo creía que las estadísticas sobre el tiempo que pasamos ante un ordenador, las tabletas o los teléfonos ... móviles (las televisiones parece que ya ni cuentan) eran una especie de recurso informativo con ciertas dosis de alarma social para llamar la atención, porque, más o menos, eso del peligro de estar todo el día entretenido con el móvil ya lo conocía yo en mis años de juventud, cuando mi madre se quejaba del demasiado tiempo que empleábamos en ver la televisión con el argumento de que atontaba y nos robaba mucho sueño.
Así que no me preocupaba demasiado el dato de que los españoles somos los quintos del mundo que más tiempo dedica a mirar los móviles, con una media de 2 horas y 11 minutos por día, sólo superados por brasileños (4 horas y 48 minutos), chinos (3 horas y 3 minutos), estadounidenses (2 horas y 37 minutos) e italianos (2 horas y 34 minutos).
Pero he comenzado a sospechar que a lo mejor hay algo grave en tanta exposición a las pantallas al saber que los grandes creadores de Silicon Valley, ésos que inventan, diseñan, producen y venden la tecnología digital que nos empapa hasta los huesos, crían a sus hijos alejados de esa tecnología, en colegios donde los escolares escriben y calculan las operaciones matemáticas con lápiz y papel, los maestros explican con tizas y pizarras clásicas y se prohíbe cualquier artefacto electrónico, hasta una simple calculadora.
Considerar la tecnología digital como una posible adicción contra la que hay que defenderse puede parecer una exageración, y el tiempo nos dirá si las generaciones expuestas a estos peligros crecerán con nuevas taras o con más habilidades. Pero la cuestión se revuelve paradójica cuando al mismo tiempo nos quejamos de la escasa formación digital orientada al empleo que al parecer tenemos en España, tal y como nos advierte el estudio anual de la Comisión Europea. Así que ahora no sé qué es mejor, si estar enganchado a cualquier pantalla o quedarse sin trabajo por ser un analfabeto tecnológico. ¿O se puede ser ambas cosas?
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