Humor masculino y culino

Y no empezó mal la tarde –tras unos incomprensibles 200 segundos de videos de golpes y caídas que anunciaban el concepto primario del humor de los guionistas– con un juego de palabras estilo 'Mota', convirtiendo el saludo de 'Nice to meet you' en un 'No hay tomillo'.

Una presentación que enredaba los papeles de cada uno con el tema de la tontura y acabó en un baile de tres alumnos de escuelas de danza muy diferentes, alguno en su primer día de clase.

Luego se intentó subir el nivel acudiendo a autores clásicos como Baudelaire («La risa es satánica, luego es profundamente humana») o Nietzsche («El hombre sufre tan pavorosamente en el mundo, que se ha visto obligado a inventar la risa») que acabaron en una antología del pedo, con Flo como maestro de ventosidades y la pareja Mota-Segura de presentadores y comentaristas. Fue el número central.

Lo escatológico triunfaba unido a cosas como un diálogo entre un pato y un pollo: «¡Pato! Lo que tú haces con la pata, yo lo hago con la…». Y así se fue haciendo de noche, pedo va, culo viene, pajas por medio, dentro de un estilo de humor ramplón del que solo se salvaban los momentos de imitaciones a Rajoy, Carlos Herrera, Juan Carlos Monedero o Miguel Ángel Revilla. Lucimiento de Flo y Mota.

Una velada celebrada por el público que parece gustar de un humor muy masculino, primario y lleno de gracietas de otros tiempos. A más de un espectador le cansó –no digamos ya a espectadoras–. Pero, como hubo algunas perlas, allá va una llena de humor negro: «Se murió mi tía la de Tenerife, una menos en Canarias». Al final uno ya eligió quién es el más listo del trío y no es Santiago Segura.