Indigentes

Triste pedir pero más triste robar. No mires desde arriba estamos en el mismo barco. Ojalá no caigas en esta vida Dios te bendiga. Acepto ... comida. Ayúdame para vivir si puedes. Estoy enfermo de sida, pido una ayuda. No tengo nada. Cualquier ayuda o trabajo de lo que sea. Tengo niñas por el amor de Dios ayúdame. Por favor ayudarme mi marido está muerto tengo 4 niño. Soy una familia pobre tengo 4 niños no tengo trabajo soy enfermo de corazón soy operado de ulcera no teno casa por favor aiudame una moneda gracias. Cualquier ayuda, una moneda, comida o trabajo. Pido para comer. Sin techo Pido ayuda o trabajo. Vivo en la calle Pido una ayuda Alimentos Gracias Perdón por las molestias. Cualquier ayuda, trabajo de lo que sea. Estas leyendas pueden leerse sobre precarios cartones al pasar a su lado. Otros textos se refieren a su origen geográfico: Español sin familia y sin recursos. Asturiano, solicito tu ayuda. Soy cántabro sin recursos. Español sin ayudas acepto trabajo. Soy un español sin recursos pido una ayuda para sobrevivir. Una ayuda para poder llegar a Zaragoza. Chica asturiana sin recursos. Bilbaíno Parado acepta cualquier trabajo o una ayuda. Necesito dinero para volver a casa. Estoy de paso Pido una ayuda para salir. Les vemos haciendo punto, figuras con alambres, crucigramas y jeroglíficos, leyendo un libro, con un perro, con un instrumento: una flauta, una guitarra... Son pordioseros. Mendigos. Excluidos sociales. Detrás de cada uno de ellos hay una historia, un drama. La escritora Laetitia Colombani acaba de publicar una nueva novela, 'Las rebeldes', en la que reflexiona sobre los sin techo. Una mirada a la sociedad actual. Conciencia social y olvido.