Gracias al jugador nº 12 de la Democracia

Tanto en mi etapa como senador, como anteriormente en el Congreso de los Diputados, he tenido siempre muy clara la importancia del trabajo en equipo. Detrás de cada una de las iniciativas que preparamos, detrás de las leyes que se elaboran hay siempre un equipo de gente, que realizan una labor encomiable. Gracias a todos por vuestra ayuda y apoyo.

Es admirable la labor de tantos concejales y alcaldes que día a día luchan por mejorar la vida en sus municipios y pueblos. Y es admirable el tiempo que dedican a pensar no solo en sus pequeños problemas o desafíos, sino el interés por el bienestar de toda España. He tenido la fortuna de conocer de primera mano a muchos de ellos, hasta en el último valle de Cantabria, y es algo que me ha alentado siempre en mi labor parlamentaria. Gracias.

En el fútbol siempre se habla de los aficionados como el jugador número 12. Sentir el aliento, la ilusión de quienes están en la grada supone un elemento de motivación superior para quienes están en el césped. En política ocurre algo semejante. En estos años como representante de los ciudadanos de Cantabria he sentido muy de cerca el aliento de tantos afiliados y simpatizantes que realizan una tarea muy poco vistosa, pero muy eficaz. Gracias.

Ese jugador número 12 se ve también representado por todos y cada uno de los vecinos, amigos y sobre todo y de forma especial, la familia. Siempre pendiente, siempre apoyando. Muchas gracias. Os debo todo.

Ahora que termino esta etapa en el Senado quiero agradecer de corazón el afecto y la comprensión de todos ellos. Y pido perdón si en algún momento no he estado a la altura de lo que ellos esperaban. Vuelvo a la actividad privada. Y es que la política no se agota en un cargo público. La política es algo más grande para quien tiene espíritu de servicio a una comunidad.

En cualquier caso, en el Parlamento o en mi pueblo, en las redes sociales, con los vecinos y amigos, seguiré defendiendo los mismos principios: la defensa de la vida humana, la familia, la libertad en su más amplio sentido de la palabra, el respaldo a los emprendedores, la importancia de la transformación digital, y el diálogo respetuoso con todos. Soy padre de tres hijos y si estoy en política es porque quiero lo mejor para toda su generación. Cantabria se lo merece.

Gracias Cantabria.