El reto de la igualdad, con cambios en el escenario político

El intenso ciclo de Irene Montero al frente del Ministerio de Igualdad estuvo caracterizado por la división entre las distintas sensibilidades del feminismo, por el ruido político, judicial y mediático y la convulsión del debate ciudadano en torno a las leyes 'trans' y 'sólo sí es sí' de las que fue promotora. Hasta que en la nueva legislatura, tras las elecciones del 23-J y la fractura de su partido, Podemos, con el Sumar de Yolanda Díaz, se vio desalojada del Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez.

La cartera de Igualdad está desde entonces en manos del PSOE y su nueva titular, Ana Redondo, intenta navegar en la controversia y conciliar las relaciones entre el feminismo clásico y el 'queer', por ejemplo apoyando las dos marchas moradas, la oficial y la alternativa, en este 8-M. Los resultados son desiguales: hay avances hacia la pacificación y también episodios de agresividad y desencuentros entre las facciones del movimiento feminista.

El debate sobre la mujer y la igualdad siguen, desde luego, dominadas por la izquierda política, no hay más que ver en las marchas conmemorativas los lemas colaterales sobre la represión israelí en Gaza y las más escasas referencias a la opresión que las mujeres padecen por el Islam, pero en los actos de estos días los vetos y rechazos a los partidos del centro y la derecha no han sido tan virulentos como los que proliferaban antes. Los rifirrafes políticos, como los de Pedro Sánchez e Isabel Ayuso, no impiden que, por ejemplo, en la Ley de Paridad, que se tramita en el Congreso para su aplicación en la actividad política y en la empresa privada, es probable que se apruebe con un alto grado de entendimiento entre PSOE y PP, frente a la oposición radical de Vox.

En Cantabria, los comicios autonómicos y municipales del 28 de mayo de 2023 consagraron un cambio de ciclo favorable al PP, condenado a la oposición en el Parlamento durante los ocho años anteriores, que ha venido aparejado a un gran protagonismo de las mujeres. La presidenta María José Sáenz de Buruaga se apresuró a subrayar esta realidad en la sesión de investidura: ella misma al frente del Gobierno regional, María José González Revuelta en la presidencia del Parlamento y Gema Igual, alcaldesa con mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Santander. Tres mujeres en los cargos más relevantes de la política cántabra, junto a la delegada del Gobierno, la socialista Eugenia Gómez de Diego, nombrada por Madrid para sustituir a Ainoa Quiñones. Sienten en el PP que en esta nueva coyuntura están homologados más que nunca para tener una presencia destacada en la reivindicación y el avance en la igualdad de género sin pedir permiso ni a la izquierda ni a nadie.

Una cosa es que las mujeres ocupen los cargos y otra que hagan políticas para las mujeres, oponen con rotundidad desde el PSOE y algo más suavemente los regionalistas. Zuloaga niega el pan y la sal al feminismo de Buruaga y el PP por suprimir el programa 'Mujer y Cultura', por su tibieza contra la prostitución y la violencia de género, por la brecha de género en la Administración regional o por el veto a las mujeres en un programa de empleo del Ayuntamiento de Camargo. Por no hablar, ironiza el PSOE, del acto conmemorativo del Gobierno regional para el 8-M con la actuación de un mariachi íntegramente masculino.

En Santander, las vísperas del 8-M se han calentado a propósito del cartel municipal conmemorativo con el lema 'Igual dad', que juega con el apellido de la alcaldesa. Ella dice que no tiene nada que ver con los atrevidos carteles instalados en las marquesinas de los autobuses y que no iba a retirarlos. Bueno, es ese 'punto Ayuso' provocador que le gusta emplear a la regidora a veces, y que debiera administrar porque la sobreexposición de la presidenta madrileña que se mete en todos los charcos seguramente empieza a pasarle una factura de desgaste.

No todo son controversias estériles. Entre el ruido desapacible de la política emergen iniciativas saludables y constructivas como 'EnClave', un foro feminista que alientan María Luisa Peón (PP), primera directora general de la Mujer en Cantabria, Rosa Inés García, dirigente socialista de larga trayectoria y María Luisa San Juan, ex concejala de Ciudadanos en Santander, quienes desde sus diferencias ideológicas promueven espacios de tolerancia y encuentro para el avance de la mujer hacia la igualdad.