Secciones
Servicios
Destacamos
En la Universidad de Ratisbona, Benedicto XVI, afirmó en 2006 que «al principio ya existía El logos... Logos significa tanto razón como palabra, una razón que es creadora». Sin querer meterme en muchas profundidades filosóficas y teológicas, no entiendo muy bien la tenacidad que ponen ... algunos científicos en negar la existencia de Dios, como si le hubiesen cogido tiña por ser lo que ellos no son, según el catecismo de la doctrina cristiana de 1965: «Nuestro Padre que está en los cielos, Creador y Señor de todas las cosas que premia a los buenos, y castiga a los malos». Y visto cómo anda el patio, pues no es de extrañar que algunos le tengan manía.
Aún me acuerdo de lo que yo les decía a mis alumnos de Primaria: «Dios puede existir o no, pero si existe mejor que sea nuestro Padre, que no un tirano de tres al cuarto, que nos amargue toda la eternidad», pensamiento y reflexión que ellos entendían perfectamente, acostumbrados como estaban a que sus padres les castigasen sin ver la televisión,
Al margen de castigos, infiernos y otras llamas después de las de la incineración, la cosa está que arde con lo de si fue primero la gallina o el huevo, porque al margen del gallo, a ver quién da con la solución, por mucho que te pongas como Darwin a mirar al mono, a ver si es tu 'tataratatísimoabuelo' cuando los dinosaurios te mandaban a hacer gárgaras de un coletazo.
O sea que la 'Teoría de la Chiripa' no me la trago, aunque me crea lo del Bing Bang; porque vamos a ver, quien se cree, 'palabrita del Niño Jesús', que en una macro explosión incontrolada la Tierra, oye, se quedó a la distancia exacta del Sol para que no nos congelásemos, ni nos achicharrásemos: y no solo eso, sino que también una piedra muy gorda llamada Luna se quedase orbitando alrededor de nuestro planeta para que hubiese luz durante toda la noche y gratis, al precio que está la energía.
Vamos, que no cuela, pues no es solo la luz, el corte de las maderas, las mareas, las fases lunares, el estado de ánimo de los lunáticos, y a ver que hacen sin ella los búhos y los mochuelos, los juerguistas y vampiros del camposanto.
Como dice la canción: «Dios está aquí, tan cierto como el aire que respiro».
Y quien no se lo crea, pues allá él, que siga como el de la tiza, con la 'Teoría de la Chiripa', y eso sí, sin ponerle pegas a lo del séptimo día descansó. ¡Ya les vale!
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.