¿Ibiza del norte? No, gracias

En estas últimas semanas se han sucedido los anuncios en torno a una idea pergeñada hace décadas por el empresario cántabro Emilio Bolado: la construcción de un campo de golf de 18 hoyos y una urbanización en Ribamontán al Mar. Esos terrenos salen a subasta, y entre los aspirantes a llevar a término un diseño plagado de dificultades urbanísticas y legales, ha llegado un grupo balear que anuncia que pretende convertir Cantabria en la Ibiza del norte. Confiesan abiertamente que el mercado turístico en sus islas de origen «está saturado», y uno se pregunta si vienen a saturar igualmente el nuestro.

Todos los cántabros coincidimos en la necesidad de poner en marcha vías de progreso y desarrollo de esta región, pero sin sacrificar su mayor tesoro, su patrimonio natural, su carácter, su territorio. Reflejo de esa preocupación de la mayoría de los hijos de esta tierra fue la interpelación a la presidenta por parte de una vecina, el pasado martes, en Barcenillas. Mostraba su inquietud por el futuro de los pueblos si se libera el suelo. «No te preocupes, no habrá problema», respondió Buruaga. Desconozco si la vecina del pueblo de Cantabria 2023 se quedó tranquila o no, pero el propósito de convertir esta tierra en la 'Ibiza del norte', mediterraneizar nuestra costa, vender la región a quienes tengan más dinero y expulsar a los locales, como ha sucedido en las Islas Baleares, es una expectativa como para quitarnos el sueño. Ibiza no, gracias.