Mayor que

La votación mostró la dialéctica de la situación: cuando se cede a la tentación 16-15, los populares pueden recurrir a Vox, que, aunque irritado con los de Feijóo, malamente querrá dar bazas a otros partidos que los excluyen hasta de la conversación. Y entonces el 'mayor que' ya no es el 16-15, sino el 19-16. Es evidente que, si los 16 presionan en todo el campo como en baloncesto, al final consolidarán la cohesión de los 19. Esta puede convenir a los designios del PSOE, con su discurso impostado sobre fantasías ideológicas, pero no a los del PRC, porque, si se torna irrelevante para Cantabria, solo le quedará convertirse en un minipartido progresista; como el Sumar de Yolanda Díaz, pero con albarcas. Ante este horizonte, muchos alcaldes y cargos municipales del PRC torcerán el gesto. ¿Qué porvenir aguarda por ese camino? ¿No hay plan mejor?

El voto fue error táctico importante, porque el PRC, que parecía hasta entonces el inteligente y deportivo facilitador de la legislatura, apareció de pronto como una fuerza solo astuta, acechante y, por ello, poco creíble. Y con ese error fortaleció a Vox, a quien se supone que quiere debilitar. Por ese método, no les arrendamos la ganancia. Los de Abascal han exhibido su capacidad de sumar 19. Podrían hacerlo de nuevo incluso en la primera votación de investidura, gratis, como gesto de poderío. Ahora Vox le debe un favor al PRC. Otro más. Si se acumulan, habrá que ir pensando en la comida de homenaje.