El modelo de Gompertz

Acabamos de consumir el primer día de la cuarentena preventiva y generalizada, encerrados en nuestras casas, enchufados al televisor a jornada completa y consumiendo el contenido de nuestras neveras sin prisa pero sin pausa, por matar el aburrimiento más que el hambre.

Mucha gente se estará preguntando por la utilidad de esta medida. ¿Servirá para acabar con el virus? La respuesta puede estar en el modelo matemático de Gompertz.

Benjamin Gompertz fue un matemático inglés nacido en 1779; no tuvo acceso a la educación universitaria, así que estudió matemáticas por su cuenta y llegó a ser miembro de la Royal Society. Su trabajo en el ramo de los seguros, donde llegó a dirigir la Alliance Assurance Company, le llevó a aplicar en ese ámbito su tal ento para las matemáticas.

Gompertz diseñó su modelo matemático para estudiar la mortalidad humana, suponiendo de partida que la resistencia de una persona ante la muerte disminuye a medida que aumenta su edad. Con el tiempo, y aplicando leves modificaciones a la formulación del modelo, su uso se ha extendido a otros campos. Ahora se utiliza para estudiar desde la comercialización de los teléfonos móviles, hasta el crecimiento de los tumores o la velocidad de propagación de las enfermedades. En este caso, pone de manifiesto que la velocidad inicial de difusión es baja, que aumenta mucho al crecer el número de afectados y después disminuye con rapidez.

Daniel López, investigador de la Universidad Politécnica de Cataluña, ha aplicado el modelo de Gompertz a la epidemia de coronavirus, lo que le ha permitido predecir que el Covid-19 va a ser detenido, y cuando.

López asegura que hora mismo estamos en la fase de incremento en el número de contagios; esta fase durará entre siete y diez días, a partir de ese momento la velocidad de contagio decrecerá progresivamente hasta alcanzar un nivel residual en el plazo de 20 a 30 días.

Al quedarnos en casa reducimos el vector de contagio, ralentizamos la difusión de la enfermedad y evitamos que se colapsen las urgencias. Tomemos conciencia, es la parte que nos toca en la solución del problema.