La pesimista

Soumya Swaminathan ha declarado en una conferencia digital de Financial Times: «Pasarán cuatro o cinco años hasta que tengamos a la Covid-19 bajo control». Y aunque este nombre imposible nos resulte desconocido, y tengamos la tentación de ignorar esas palabras como si fueran una opinión surgida en un debate de barra de bar, resulta que esta señora es la científica jefa de la OMS, por lo que habrá que suponerle cierto conocimiento acerca del tema.

Para Swaminathan, la esperada vacuna contra el coronavirus «parece por ahora la mejor salida». Y la científica matiza esta potencial salida con muchos peros, tanto sobre su eficacia y su seguridad, como sobre su nivel de producción y distribución equitativa. En este sentido, deja entrever que la brecha entre países ricos y pobres puede acentuarse con una llegada temprana de la vacuna los primeros y un mayor retraso en los segundos.

Las opiniones de Swaminathan en cuanto a los factores que determinarán por cuánto tiempo y en qué medida el coronavirus va a seguir siendo una amenaza se guían por una lógica en la que incluye la posibilidad de que éste mute, las medidas de contención que se implementen, y si se desarrolla una vacuna efectiva. Deja muy claro que ahora mismo no tenemos suficiente conocimiento acerca de este virus como para poder predecir la evolución de la pandemia; potencialmente, ésta podría empeorar.

La visión pesimista de Swaminathan choca con la necesidad que sentimos de volver a la normalidad. Hay que recalcar que nunca en la historia se había producido un despliegue de calibre semejante frente a una enfermedad. La cantidad de ensayos con medicamentos, la multiplicidad de proyectos de vacuna por todo el mundo y la cobertura informativa que están teniendo han alcanzado una magnitud tal que invita al optimismo.

Aun así, tenemos que insistir en la necesidad de ser prudentes. Erradicar la enfermedad, incluso contando con una vacuna efectiva, no será un proceso fácil ni breve. Mientras tanto, tenemos que descubrir entre todos cómo alcanzar una nueva normalidad.