La profesión médica unida en Santander

La Asamblea General de la Confederación Médica Latinoiberoamericana y del Caribe (Confemel) es el punto de partida de esta cumbre en la que España, una vez más, juega un papel crucial como puente de unión entre el viejo y el nuevo continente. En un mundo cada vez más interconectado, es fundamental fortalecer los lazos entre las diferentes regiones para afrontar los desafíos comunes que enfrenta el campo de la salud y, estos días, Santander será ese espacio necesario y propicio para el diálogo y la cooperación entre profesionales de distintas culturas y contextos, enriqueciendo así las prácticas médicas y fomentando la innovación en la atención sanitaria.

La formación médica continuada será uno de los ejes transversales que esté presente en cada rincón del Palacio de la Magdalena, y no lo es por casualidad. Justo hace dos años, en Paraguay, la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS), la Confederación Médica de Iberoamérica y del Caribe y la Organización Médica Colegial (OMC), originamos un acuerdo para la acreditación de la formación médica continuada, con criterios y procedimientos comunes, libre de cualquier conflicto de interés.

Este convenio supuso un enorme paso hacia delante en materia de desarrollo profesional para cientos de miles de profesionales facilitando el acceso a una formación acreditada de excelencia con el único propósito de salvaguardar la calidad asistencial para los pacientes, objetivo prioritario para los facultativos en cualquier región o país del mundo.

Pero si la formación médica es uno de los fines de esta gran cumbre médica, la deontología y la ética médica es la meta. En su afán por defender, promover y divulgar la deontología entre los profesionales y la sociedad en general, la Organización Médica Colegial de España presentará en la sede de la soberanía popular del pueblo cántabro, su Parlamento, el Código de Deontología Médica, un texto aprobado hace año y medio y que está a la vanguardia de la ética médica en todo el mundo. El código español es referencia para todos los facultativos que estos días se darán cita en Santander, y representa los compromisos de la profesión médica con la ciudadanía: la competencia profesional, la confidencialidad, la honestidad, la adecuada relación médico-paciente, la investigación libre de cualquier conflicto de interés y la responsabilidad profesional, entre otros. Todos ellos alineados con los tres principios Universales de la Medicina: Hacer el bien, respetar la autonomía del paciente y defender la justicia social.

Al reunir a médicos y profesionales de la salud de América Latina y Europa, este evento promueve la colaboración internacional en la búsqueda de soluciones efectivas para los retos sanitarios globales, consolidando así el compromiso conjunto con el bienestar y la salud de todas las personas. En un mundo marcado por desafíos sin precedentes en el ámbito de la salud, es más crucial que nunca fomentar el intercambio de conocimientos entre profesionales médicos de todo el planeta. En un contexto donde la pandemia global ha evidenciado la interconexión de nuestras realidades y la urgente necesidad de cooperación, debemos reconocer que el progreso en la medicina no conoce fronteras ni barreras geopolíticas.

Ante el actual panorama de conflictos y divisiones, la profesión médica puede y debe actuar como un puente que une a las personas más allá de sus diferencias. Al trabajar juntos, los profesionales médicos pueden trascender las barreras culturales y políticas para enfocarse en lo que realmente importa: el bienestar y la salud de todas las personas, sin distinción.

Solo mediante la cooperación internacional y el compromiso compartido con la salud pública podremos superar los desafíos presentes y futuros a los que se enfrenta la humanidad. La riqueza histórica, cultural y científica de nuestra ciudad brinda un escenario idóneo para reflexionar sobre los valores fundamentales de la medicina y su impacto en la sociedad contemporánea.