La tragedia de los bienes comunes

Si un ganadero piensa solo en sí mismo, aunque sepa que no es bueno para el suelo la sobreexplotación, llevará ganado extra pensando que no se causará gran perjuicio. El problema es que otros ganaderos pensarán lo mismo y al final todos acabarán con el recurso público.

Desde el miércoles 24 de agosto de este año y hasta el 31 de diciembre de este año se pueden adquirir abonos gratuitos para que el viajero frecuente haga uso de los trenes de Cercanías y Media Distancia. El problema es que los abonos gratuitos reservan muchas más plazas que el uso efectivo que se realiza de las mismas. Lo paradójico es que cuando ese usuario realiza el viaje observa con sorpresa que el vagón está casi vacío.

La paradoja de los bienes gratuitos es como la tragedia de los bienes comunes pues a largo plazo se despilfarran los recursos públicos. Además, los abonos son iguales para todo el mundo. Esto es, se está ofreciendo un abono gratuito a personas que pueden perfectamente pagarse los billetes del tren. No parece muy acorde con la situación actual favorecer el despilfarro de recursos públicos.