Matthew McConaughey: imparable

Atrás queda el galán que interpretaba papeles bobalicones en comedias románticas taquilleras como 'Novia por contrato' o 'Cómo perder a un chico en tres días'. McConaughey ha sabido hacerse mayor y dar un giro exultante a su ecléctica filmografía, aunque ya apuntaba maneras en sus comienzos, colaborando con cineastas como John Sayles en 'Lone Star' (1996). 'La matanza de Texas: La nueva generación' (1994) le dio a conocer en la gran pantalla. Desde entonces no ha parado de interpretar personajes excéntricos, al límite, en ocasiones oscuros, siempre peculiares y diferentes. Centrándonos en sus últimas gestas cinematográficas, se puede abrir fuego con 'El inocente' (2011), donde se ponía en la piel de un picapleitos con un sedán Lincoln Continental a modo de despacho, lo que le dotaba de una curiosa personalidad. De labia desatada y carisma indudable, tras dedicar su tiempo a defender a criminales de tercera en su coche-oficina su carrera como abogado tomaba carrerilla al tener que limpiar el honor de un joven playboy podrido de dinero de Beverly Hills, arrestado por atacar a una joven. Basado en la novela de Michael Connelly, el filme aprovechaba la coyuntura para hablar del ser humano y sus principios, de las posibilidades de una crisis de conciencia y demás temas recurrentes en el género. Del mismo año es 'Killer Joe', donde se puso a las órdenes del inefable William Friedkin para dar cuerpo a un personaje deleznable, un policía corrupto que acepta asesinar por dinero. El filme cuenta con una de las escenas más inquietantes del cine reciente, con una pata de pollo como elemento sórdido.

'Killer Joe' llegó tarde y con cuentagotas a nuestro mercado, como suele ocurrir con el buen cine alternativo, al igual que 'Bernie' (2012), del siempre interesante Richard Linklater, donde McConaughey compartía planos con Jack Black y Shirley MacLaine. Tardó tres años en estrenarse en nuestras salas, a pesar de su interés, habiéndose rodado antes del éxito de 'Boyhood' y con antelación a 'Antes del anochecer', ambas del mismo apreciado director. La obra relata las vicisitudes de un enterrador muy querido en un pueblo de Texas que se hace amigo de una viuda rica. El argumento está basado en un hecho real y en el artículo de una revista mensual: 'Midnight in the Garden of East Texas', escrito por Skip Hollandsworth. 2012 fue un año prolífico, con trabajos como 'Magic Mike', a priori un cruce entre 'Full Monty' y 'El bar Coyote', pero con el reputado Steven Soderbergh tras las cámaras. McConaughey encarna en esta aceitosa producción, bien untado de bronceador, al propietario del club Xquisite, donde se despelotan Channing Tatum y compañía para el deleite de féminas desatadas. En la misma temporada, 'Mud' dio un poderoso toque de atención a aquellos que no se tomaban muy en serio la carrera de uno de los rostros del momento. Dirigida por Jeff Nichols ('Take Shelter'), describe la aventura de dos chicos que se topan con un hombre que dice ser un proscrito que huye de la ley tras haber matado a un hombre. Una isla del Mississippi es el marco de este relato de sacrificio y redención en cuyo reparto también figura Reese Witherspoon.

Cerrando 2012, cabe citar 'El chico del periódico', basada en la novela de Peter Dexter, la historia de dos hermanos -el otro es Zac Efron- que vuelven a encontrarse por azares del destino. El mayor es un periodista de prestigio que regresa a su ciudad natal para escribir un artículo sobre una extraña mujer (Nicole Kidman) que se dedica a escribir cartas a presos condenados a muerte. Uno de ellos (John Cusack) puede ser inocente. Sin duda, el merecido pelotazo le llegó a McConaughey en 2013, con su galardonado rol en 'Dallas Buyers Club': Ron Woodroof, hijo de Texas, un electricista y cowboy de rodeo que en septiembre de 1992 sucumbió a las complicaciones causadas por el SIDA. Siete años antes le habían dado 30 días de existencia. A la edad de 35 años se encontró condenado al ostracismo por sus amigos y compañeros de trabajo debido a su dolencia. Muriéndose, casi arruinado, decidió sobrevivir y, contra todo pronóstico, prosperó y ayudó a salvar otras vidas.

Legiones de cinéfilos se frotaron las manos ante la llegada 'Interstellar' (2014), la última película de Christopher Nolan, el cineasta que despierta filias y fobias. La prensa especializada y los amantes del arte cinematográfico volvieron a piropear y apedrear, sin ton ni son, la propuesta del máximo responsable de 'Origen' y 'Memento', pero su protagonista brilló sin que nadie le tosiera. La película describe las peripecias de un grupo de exploradores que deciden atravesar un agujero de gusano espacio-temporal con el propósito de superar los límites conocidos por el ser humano y cruzar distancias inimaginables. La historia ocurre en una Tierra futura, azotada por una crisis y McConaughey es el piloto principal de la nave. El actor es un reconocido amante y defensor de los animales -se dice que rescató a varias mascotas durante la tragedia del huracán Katrina- y en una ocasión fue arrestado por perturbar la paz vecinal tocando los tambores desnudo en su casa, toda una estampa. Desde 2006 comparte su vida sentimental con la modelo brasileña Camila Alves, con la que ha tenido tres hijos y contrajo matrimonio en junio de 2012. Al parecer, encuentra tiempo para todo.