¿Por qué 'Los Soprano' y 'The Wire' siguen siendo imbatibles?

A David Chase la televisión no le interesaba. Y en realidad siguió sin interesarle después de seis temporadas de 'Los Soprano'. "La televisión no me importa. No me importa adónde va ni ninguna otra cosa", dijo tres años después del final de su producción. "Soy una persona que quería hacer películas. Punto", aseguró. La relación de Chase con su madre le inspiró un filme sobre su mafioso, con el que pretendía rendir homenaje a Scorsese o Coppola. Después de años tratando de impulsar el proyecto en vano, y antes de tirar la toalla, se le ocurrió convertirlo en una serie, aunque en realidad tenía nulas esperanzas de que alguna cadena accediese a producirlo. Pensó que con suerte lograría rodar un piloto con buenos medios. Lo que no contaba es que HBO se iba a interesar por la idea, que se arriesgaría a encargar una temporada completa y que a la audiencia le fascinaría tanto.

"La ficción contribuyó más que ninguna otra a cambiar la percepción que se tenía sobre las series, que de este momento en adelante empezarían a ser consideradas seriamente como una forma artística. Alrededor de 'Los Soprano' se creó el consenso de que se trataba de una obra que debía tratarse de una forma diferente a como se hacía hasta entonces con las series, como si esta no perteneciera de hecho al mundo de la televisión, sino a un ámbito más cercano a la alta cultura, asegura Toni de la Torre en su libro 'Historia de las series'. La ficción abrió la puerta de este medio a escritores, guionistas y productores de cine; permitió que nuevos argumentos se tratasen en la televisión; y se introdujo una figura que después ha sido determinante en las series de este siglo, la del antihéroe. Tras Tony Soprano llegaron Walter White, Don Draper o Dexter Morgan. Pero el primero fue el que ideó Chase. 'Los Soprano' se estrenó con un seguimiento discreto, que aumentó a medida que avanzaron las temporadas. Tanto que alcanzó cifras récord para HBO, que únicamente han sido superadas después por 'Juego de Tronos'.

Los datos de 'The Wire', sin embargo, siempre fueron bajos. De hecho al finalizar la tercera temporada estuvo a punto de ser cancelada, pero gozaba de tan buenas críticas que HBO decidió mantenerla en antena por el prestigio que le reportaba. David Simon trabajó como periodista durante veinte años para el periódico 'The Baltimore Sun', donde se encargaba de cubrir las crónicas de sucesos. Eso, por descontado, le inspiró muchas historias que primero llevó al papel y más tarde a la pantalla. A Simon el periodismo le decepcionó, o más bien los que dirigían los medios en los que trabajaba, y por ello buscó nuevos escenarios en los que desarrollar su labor.

Debutó en la tele con 'Homicide' y 'The Corner', en las que ya se discernían algunas de las líneas que más tarde desarrollaría en 'The Wire'. No fue sencillo que le comprasen la idea, pero Simon persistió, incluso despreciando al público al que supuestamente iba dirigido su proyecto. Cabe recordar que el guionista es recordado por aquella célebre frase, "que se joda el espectador medio", cuando le espetaron por los temas que trataba en su serie. Pues bien, cuando estaba creando 'The Wire' mostró una enorme confianza en su producto. "Si esto no funciona, que les jodan, no seguiremos en la tele. Parece que hay oportunidad, pero si estamos equivocados, volveremos a los libros", llegó a exclamar. Ideó una serie policiaca que se saltaba todas las convenciones de este género y de cualquier ficción en general. Realizaba pocas concesiones, renunciaba a los mecanismos tradicionales para enganchar al espectador, no permitía que la audiencia se identificase con los protagonistas... 'The Wire' funciona como un documento periodístico, con un background y una faena de documentación detrás impresionante. Y es de esos trabajos en los que al espectador se le pide un papel activo. Ha de poner mucho de su parte para entender y entrar en la historia. El que no estuviese dispuesto a realizar este esfuerzo no sería bien recibido en la propuesta.

'Los Soprano' y 'The Wire' fueron dos excepciones, concebidas en unas circunstancias que ya de por sí les hacen especiales. Sorprendieron a la audiencia y llegaron en un tiempo en que el público no estaba preparado para este tipo de televisión. Por eso siguen siendo tan bien consideradas. Después se han tratado de imitar -sobre todo la primera- pero la sombra de las originales era demasiado alargada.

Es lógico, por tanto, que cuando se plantee a seriéfilos y expertos que destaquen los mejores títulos de este siglo ambas producciones sigan recibiendo todo tipo de alabanzas y encabezando cualquier ranking. Este periódico, junto al resto de diarios regionales de Vocento, dio a conocer hace unos días un listado de las mejores series del siglo XXI elaborado por 50 profesionales expertos en el medio. 'Los Soprano' ocupa el primer lugar seguida por 'The Wire'. Son imbatibles.

La idea era señalar aquellas que por su argumento, su puesta en escena, su desarrollo o su repercusión merecen ser reivindicadas, recordadas para la posteridad y revisitadas para su disfrute. Se podían escoger producciones estrenadas a partir de 2000 o que al menos en ese año y en los posteriores se estuviesen emitiendo (aunque su inicio fuese anterior, en los 90). Y se permitía incluir series de cualquier país, y del género y con la duración que fuese. Sin excepciones. Había toda clase de opciones, pero vencieron los títulos de David Chase y David Simon, quizá porque las sacaron adelante transgrediendo al propio medio. No fueron concebidas como ideas propias de televisión. Fueron dos buenas ideas, que se podrían haber desarrollado en cualquier otro medio. Prevalecía la idea al propio formato o destino. Cabe destacar la ambición de ambas, en cuanto a tramas y formas de plasmarlas.

¿Existe algún título que les pueda hacer sombra? La propia lista da algunas claves. Se trata de sorprender al espectador, de ofrecerle algo que no le hayan dado antes. Eso es muy complicado teniendo en cuenta la cantidad de títulos que se estrenan cada año. De vez en cuando, sin embargo, surge alguna idea brillante y se acierta. Ocurrió con 'Mad Men' (ocupa el tercer lugar de la lista), que propone recuerar una época y un estilo de vida del pasado para explicar asuntos del presente. Después se ha imitado la propuesta hasta la saciedad pero los resultados han sido menores. Con 'Juego de Tronos' (sexta en la clasificación) ha sucedido algo similar. Existían propuestas de este tipo en cine (con 'El señor de los anillos') pero en televisión era un producto inédito, y por ello ha provocado un fenómeno sin precedentes.