Las 10 mejores películas de Jean-Luc Godard en las plataformas

Jean-Luc Godard fue uno de los grandes innovadores del lenguaje cinematográfico y el cineasta que más ha influido en el cine moderno. En su larga trayectoria se reinventó varias veces, aunque de su última etapa apenas hay nada en las plataformas, ni títulos de su primera etapa como 'Una mujer es una mujer', ni 'Simpatía por el diablo' (One+one') con The Rolling Stones, ni por supuesto de la última, ni siquiera de 'Nuestra música', película en tres partes, rodada mayoritariamente en Sarajevo tras el asedio en la Guerra de los Balcanes que se puede entender como su última gran película. Todos ellos títulos que de estar disponibles aparecerían en esta lista.

Hijo de un médico y de una hija de banqueros suizos, Godard estudió etnología en la Sorbona. En esta época comienza a descubrir su gran pasión por el cine, frecuenta de continuo la Cinemateca Francesa y los cineclub parisinos. En 1950 empezó a trabajar como crítico cinematográfico en varias revistas, entre ellas Cahiers du Cinéma, en las que utilizaba el seudónimo de Hans Lucas. En esta publicación coincidiría con la plana mayor de lo que sería poco tiempo después la nouvelle vague, es decir, con François Truffaut, Éric Rohmer, Claude Chabrol y Jacques Rivette.

Al morir su madre en 1954, se trasladó de nuevo a Suiza donde trabajó como albañil, hecho que sirvió como argumento a su primer documental, 'Operation Béton'. Al regresar a París, mientras seguía trabajando en Cahiers du Cinéma, rodó los cortometrajes 'Une femme coquette' (1955) y 'Tous les garçons s'apellent Patrick' (1957). En el verano de 1959 comenzó el rodaje de su primer largometraje, Al final de la escapada»'. Estas serían sus 10 películas imprescindibles que se pueden ver en plataformas, ordenadas de peor a mejor.

Protagonizada por Yves Montand, Jane Fonda y Vittorio Caprioli. Una historia de amor con la que Godard se sirvió para ofrecer una reflexión acerca de la sociedad, la política y el capitalismo. Francia, 1972, después del mayo del 68. Un matrimonio en crisis, en una sociedad en crisis, se queda atrapado en una fábrica debido a la huelga de los trabajadores.

La historia de la crisis de una pareja, Jacques (Yves Montand) y Suzanne (Jane Fonda), en una sociedad en crisis. Él es un cineasta desilusionado que ha renunciado voluntariamente a su trabajo desde 1968. Ella es la corresponsal en Francia de una emisora de radio norteamericana. Ambos acuden al despacho del gerente de una empresa para hacerle una entrevista. Mientras la realizan, en la fábrica se produce una revuelta y son retenidos.

El personaje que interpreta Yves Montand se puede entender como el verdadero «alter ego» del propio Godard. El cineasta se plantea si puede el amor sobrevivir a la revolución. Una batería de pensamientos inunda la película de crítica hacia la sociedad y el cine modernos y satiriza sobre la visión contemporánea de la historia.

Protagonizada por Anne Wiazemsky, Jean-Pierre Léaud y Juliet Berto. Un año antes de la eclosión del mayo del 68, Jean-Luc Godard se adentró en el tema del maoismo y del marxismo-leninismo de manera muy analítica y reflexiva, con una estética minimalista, iniciando sus análisis sociopolíticos que cobrarán más fuerza un año después. Godard mezcla los formatos documentales con los alardes formales de saltos de imagen, títulos explicativos, discursos a cámara, explicando el ambiente estudiantil que precedió a las protestas de mayo del 68.

París, verano de 1967. Algunos intentan aplicar los principios que rompieron con la burguesía de la URSS y de los partidos comunistas occidentales en nombre de Mao Tse Tung. Empapados del pensamiento de Mao y de literatura comunista, cuatro estudiantes se empiezan a preguntar por su posición en el mundo y las posibilidades de cambiarlo, aunque eso signifique considerar al terrorismo como una posible vía. Escuchan Radio Pekín, leen el Libro Rojo de Mao y realizan ejercicios gimnásticos recitando esos fragmentos. Su concienciación les lleva a pensar en la idea de realizar la verdadera revolución, creando si es menester una célula terrorista y cerrando las universidades, si es preciso colocando bombas, aunque todo ello en el plano teórico.

Gullaume (Jean-Pierre Léaud) procede de una familia rica. Cree firmemente en la violencia política y desprecia a su padre que, a pesar de luchar contra los alemanes en la Segunda Guerra Mundial, gestiona ahora un complejo vacacional como si fuese un campo de concentración. Por su parte, Yvonne (Juliet Berto) se une a una célula comunista para escapar de la mediocridad de su vida, aunque de vez en cuando se ve obligada a prostituirse cuando su novio, Henri (Michel Semeniako), no vende suficientes copias de sus libros de propaganda. Con el fin del verano y el comienzo del nuevo curso, todo volverá a su cauce. Un Godard profético que se adelantó unos meses a la revolución social de mayo del 68.

Interpretado por Jean-Paul Belmondo, Anna Karina, Dirk Sanders y Jean-Pierre Léaud. Un intento de Godard por hacer un cine comercial, pero sis renunciar a sus principios. Ferdinand Griffon (Jean-Paul Belmondo) es un profesor de lengua española casado con una italiana. Ha sido recientemente despedido de la televisión en la que trabajaba. Su mujer le fuerza a ir a una fiesta en la casa del padre de ella, el cual es empresario y quiere presentar a Ferdinand a un importante empleado. El hermano de ella deja a la cuidadora Marianne Renoir (Anna Karina) al cuidado de sus hijos. Ferdinand se siente aburrido en esa fiesta burguesa, la cual se presenta como una especie de sucesión continua de anuncios de diferentes productos, pero los protagonistas son los hablantes de las diferentes conversaciones entre la gente de la fiesta. Por lo tanto, Ferdinand roba el coche de su cuñado y vuelve a casa.

Allí encuentra a Marianne, quien había sido su amante cinco años atrás e insiste en llamarlo Pierrot. Él le ofrece llevarla a casa; sin embargo, él pasa toda la noche con ella y descubre que está involucrada en el tráfico de armas. Marianne es perseguida por unos revolucionarios argelinos, entonces deciden viajar a la playa sin dinero, dejando París y su familia atrás en un loco viaje a ningún lado. Durante sus aventuras, la pareja comete crímenes mientras intercambian ideas sobre la vida, el amor y las personas. Ferdinand es un aficionado a la lectura y mantiene un diario, tomas de las páginas de este van apareciendo intermitentemente durante la película. Tras descubrir que Marianne en realidad lo estaba engañando con otro hombre, los persigue y les da muerte con un revólver para proceder a suicidarse amarrándose cintas de dinamita alrededor de la cabeza.Godard utiliza las técnicas propias del capitalismo para dinamitarlo desde dentro. La película está basada en una novela homónima de Lionel White y como en sus películas de esta primera etapa utiliza romance, drama, comedia y crímenes en una mezcla explosiva.

Protagonizada por Mireille Darc, Jean Yanne, Jean-Pierre Léaud y Juliet Berto.. Roland (Jean Yanne) y Corinne (Mireille Darc) son una pareja burguesa, aunque cada uno tiene un amante secreto y conspira para asesinar al otro. Salen de viaje en automóvil hacia la casa de los padres de Corinne, para asegurar la herencia de su padre moribundo, acordando que tienen que matar si es necesario. El viaje se convierte en una travesía caótica y picaresca a través de la campiña francesa, poblada por personajes extraños y marcada violentos accidentes de coche. Después de que su propio coche quede destruido en un choque, los personajes deambulan a través de una serie de viñetas relacionadas con la lucha de clases y figuras de la literatura y la historia como Louis Antoine de Saint-Just (Jean-Pierre Léaud) y Emily Brontë (Blandine Jeanson). Corinne y Roland finalmente llegan a la casa de sus padres, solo para darse cuenta de que su padre murió y su madre se niega a darle una parte del botín. La asesinan, solo para caer en las manos de un grupo revolucionario hippie, que se llaman a sí mismos Frente de Liberación Sena y Oise que se mantiene a sí mismo por medio del robo y el canibalismo.

Roland es asesinado durante un intento de escape, después, lo parten en pedazos para convertirse en su alimento.La particular visión del cataclismo de la burguesía a cargo de un Godard siempre polémico. De nuevo utiliza un todo de fábula, en este caso apocalíptica, desencantada y satírica, definida como un nuevo viaje de Gulliver a través del colapso de la sociedad de consumo representada en una joven pareja de burgueses. Puro territorio Godard.

Protagonizada por Anna Karina, Sady Rebbot, André S. Labarthe. Tercer largometraje de Godard, película premiada en Venecia de la que Susan Sontag diría que es «una película perfecta» y «una de las obras de arte más extraordinarias, hermosas y originales que conocía». Como es habitual en el cine de los primeros años de la nouvelle vague, la película tiene un toque documental que muestra la vida y las calles del París de la época y se mueve entre la ficción y el reportaje. Este tono hace que Godard no entre a juzgar a su personaje, de ahí su título: «Hay que dejar a la gente vivir su vida y no hay que mirarlos demasiado porque, de lo contrario, acabamos por no comprender nada», dijo el director en su autobiografía.

Nana Kleinfrankenheim (Anna Karina) es una joven parisina divorciada, que abandona a su marido y a su hijo para iniciar una carrera como actriz. Para financiar su nueva vida comienza a trabajar en una tienda de discos en la que no gana mucho dinero. Al no poder pagar el alquiler, su casera la echa de casa. Descontenta con su vida y enamorada del cine, es convencida por una amiga prostituta para dedicarse a la prostitución de forma progresivamente profesional, sin ningún dramatismo, impulsada por el estilo de vida que ve a su alrededor. El primer día que comienza a trabajar en la calle, coincide con Yvette (Guylaine Schlumberger), una vieja amiga que le confiesa que también se prostituye por necesidad. Yvette le presenta a Raoul (Saddy Rebot), quien se convierte en su proxeneta. A partir de ese momento, Nana se irá introduciendo progresivamente en el mundo de la prostitución y su vida se irá decidiendo en la calle y en los cafés, en el lugar de trabajo o en habitaciones de hotel. Sin embargo, aunque el sexo no es más que algo mecánico, no conseguirá trabajar sin relacionarse afectivamente con los clientes.

Protagonizada por Michel Subor, Anna Karina, Henri-Jacques Huet y Paul Beauvais. Película con la que Godard se topó con la censura. La película ambientada en la guerra de la independencia argelina estuvo prohibida en Francia tres años (en España, aunque no tuviese nada que ver en el conflicto, bastante más). Año 1958, durante la Guerra de Independencia de Argelia contra Francia, un desertor del ejército francés refugiado en Ginebra, acuerda trabajar para una organización antiterrorista en contra del país africano.

Película compleja en la que Godard planrea más interrogantes que respuestas: Bruno Forestier (Michel Subor), un desertor del ejército francés, para quien ha terminado el tiempo de acción, comenzando el de la reflexión, es captado como miembro de un comando antiterrorista financiado por un grupo de extrema derecha, surgido en Francia en los años 50, vinculado a cierta clase media francesa que potenciaron todo tipo de acciones para que Francia conservase Argelia. Los miembros de dicho grupo le encargan el asesinato político de un importante miembro de la resistencia Argelina, que está en Ginebra. Ese momento de la reflexión en que se encuentra su vida, será determinante para no terminar de ser capaz de cometer el asesinato político que sus superiores le encargan.

Protagonizada por Albert Juross, Marino Masé y Catherine Ribeiro. Una película antimilitarista con forma de parábola, en donde Godard comienza ya a tomar conciencia política. En ella dos campesinos algo torpes reciben con júbilo la noticia de su movilización, felices y contentos de los desmanes que podrán cometer bajo el uniforme: Durante una guerra imaginaria el ejército francés comienza a reclutar a gente de toda clase y condición. En este caso la película se centra en dos agricultores que aceptan el rango de soldado sin pensárselo dos veces, pues creen que al alcanzar tal grado de autoridad podrán hacer lo que quieran y lograr todos sus deseos, los mejores automóviles, las bellezas naturales, las estrellas de cine, los palacios, las pirámides, todo, cualquier cosa que deseen. Fascinados por esa perspectiva, habiendo abandonado la desconfianza inicial, marchan al frente.

Esperaban una vida de desenfreno y libertad que se desmorona cuando se percatan de que les mandan a la guerra. Ulysses (Marino Masé) y Michel-Angue (Patrice Moullet) tendrán que apañárselas para volver a casa sanos y salvos. Ya involucrados en la guerra, en el combate dan rienda suelta a su instinto, asesinan, roban, humillan a hombres y mujeres, disponen de una pequeña libertad, de un pequeño poder, a pesar de su subordinación. Finalizada la lucha, regresan a casa con su botín victorioso compuesto de miles de imágenes de todas aquellas maravillas que les habían prometido poseer. Obligados por sus mujeres a reconocer que todas esas figuras huecas no valen nada, vuelven al frente para reclamar la recompensa prometida. Sus superiores escuchan sus reclamos, los pobres carabineros exigen una recompensa justa...

En el guion Godard colabora con su admirado Roberto Rosellini. La realización pobre, que mezcla imágenes de archivo, o la deficiente iluminación, es convertida por Godard en un estilo que seguirá desarrollando posteriormente en su etapa de cine militante, a raíz del mayo francés.

Protagonizada por Brigitte Bardot, Michel Piccoli, Jack Palance y Fritz Lang. El encuentro de Godard con Brigitte Bardot. una adaptación de una novela de Alberto Moravia sobre la desintegración de un grupo de gentes que se miran y se juzgan y que a su vez son miradas y juzgadas por el cine. Por primera vez aparece en la obra de Godard en tema de la relación entre el cine y la vida, algo que será una constante en su filmografía hasta la vida. El argumento gira en torno a los problemas profesionales de un escritor que se mezclan con el creciente desprecio que su mujer siente por él. Camille (Brigitte Bardot) posee unos pies hermosos y su marido Paul Javal (Michel Piccoli) los encuentra bonitos. Posee también unas bellas rodillas y él las ama, y unos bonitos pechos que él adora, y así se lo dice cuando la ve delante del espejo. Eso es el amor conyugal, y sin embargo... el amor es un malentendido.

Un día, Paul a su vez va a ponerse desnudo frente al espejo delante de Camille, y a mostrarle, no su torso ni su sexo, sino su debilidad, su vulnerabilidad. Eso va a cambiar la idea que ella tenía de él. Ella ya no verá más que su mediocridad y, decepcionada, se alejará de él. Tal desprecio conformará la historia de una pareja que se deshace. Paul Javal es un escritor y un autor dramático, ha perdido toda confianza en sus capacidades y acepta rescribir las escenas para La Odisea, una película que va a rodar en Capri el director Fritz Lang. Sin ninguna razón aparente, empieza a instalarse entre Paul y su mujer Camille cierta sensación de malestar, y poco a poco, ella empieza a despreciarle.

Godard realiza un estudio sobre la incomunicación con personajes abocados al fracaso. Gran reparto en dónde junto a una joven Brigitte Bardot y al incombustible Michel Piccoli aparece el director de cine Fritz Lang interpretándose a si mismo.

Protagonizada por Anna Karina, Danièle Girard, Louisa Colpeyn y Chantal Darget. Deliciosa, fresca y siempre moderna, la película adapta la novela pulp estadounidense 'Fool's Gold', de Dolores Hitchens, una mezcla de cine negro, comedia y drama a la que el director le añade humor. El propio Godard la describió como «el encuentro entre Alicia y Franz Kafka». Es una de las películas más destacadas de la nouvelle vague francesa. La película toca temas como la inocencia, la cotidianeidad, las relaciones de pareja y la falta de ética.

Frantz (Sami Frey), con la intención de planificar un robo, presenta, a su amigo Arthur (Claude Brasseur), a Odile (Anna Karina), que junto con Frantz acuden a clases de inglés. Los tres juntos planean el robo de la casa de un matrimonio millonario, en donde Odile trabaja de sirvienta. En el transcurso se desarrolla un trío amoroso, en el que Frantz está enamorado de Odile, Odile llega a enamorarse de Arthur y Arthur es un aprovechado que solo seduce a Odile por diversión. En el momento del robo ocurre un imprevisto, La puerta, en donde se encontraba el dinero que se proponen a robar, está cerrada, por lo que deciden posponerlo. En el segundo intento Frantz y Arthur llegan a la casa dispuestos a elaborar el robo sin importar lo que pase. Al buscar el dinero solamente encuentran una pequeña porción y se retiran. Arthur, por su ambición, regresa a la casa para buscar mejor el dinero, pero se encuentra con un dueño de la casa; Se levanta un tiroteo y mueren los dos señores. Odile y Frantz, testigos de las muertes, huyen y continúan con sus vidas juntos.

Anna Karina era ya la esposa de Godard. El filme es recordado como aquella en que se recorre todo el Museo del Louvre en 3 minutos.

Protagonizada por Jean-Paul Belmondo, Jean Seberg, Daniel Boulanger y Jean-Pierre Melville. La película con la que empezó la Nouvelle Vague. Fue su ópera prima, que rueda con 29 años a partir de un argumento de François Truffaut, por entonces su amigo y colega de Cahiers, aunque pronto se distanciarían surgiendo una profunda enemistad.

Michel Poiccard (Jean-Paul Belmondo) roba un automóvil en Marsella. De camino hacia París mata al motorista que le persigue. Buscado por la policía, encuentra refugio en casa de Patricia Franchini (Jean Seberg), una joven americana que vende el New York Herald Tribune por les Champs Elysées, que aspira a convertirse en periodista, de la que está enamorado. Interrogada por el inspector Vital, Patricia se ve inducida a denunciarle para conservar su pasaporte. Pero cuando ella intenta prevenirle ya es demasiado tarde pues un transeúnte le reconoce y avisa a la policía que lo mata en un tiroteo. Una película emblemática que reinventó el cine y que permanece como una obra maestra.

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