'Golpe de revés', una ficción pegada a la actualidad

Con esta realidad conecta 'Golpe de revés', una ficción de plena actualidad que aborda los abusos de poder y sexuales en el entorno deportivo. Protagonizada por Aidan Turner y Ella Lily Hyland, la serie de Amazon Studios aborda la relación entre una joven tenista y su entrenador y comienza en el pasado cuando Justine Pearce (Lily Haland) está disputando la semifinal de su primer Grand Slam, el Abierto de Francia, y una lesión en la muñeca le lleva a retirarse para siempre de las pistas. La narración salta entonces al presente. Justine lleva una vida desordenada, de fiesta en fiesta, y trabaja como fisioterapeuta en la Academia Longwood, el centro deportivo desde el que en su día saltó al efímero estrellato con tan solo 16 años.

Su entrenador Glenn Lapthorn (Aidan Turner), en cambio, puso un océano de por medio y se marchó a Orlando a impulsar la carrera de un tenista estadounidense que, esta vez sí, acaba de ganar su primer 'grand slam'. El regreso de Glenn a la Academia Longwood, con un contrato millonario, acaba desestabilizando a la exjugadora, que denuncia a Glenn por abusos.

Estructurada en seis episodios dirigidos por Toby MacDonald y Eva Riley, la ficción creada por Hania Elkington salta constantemente del pasado al presente para desarrollar una historia que esconde buena parte de sus bazas hasta el final de la narración. El caso de Justine encierra similitudes con decenas de casos a lo largo y ancho del planeta y no solo en el ámbito deportivo. Ahí están, por ejemplo, la actitud de las propias instituciones, que en muchos casos restan importancia a los hechos, bien porque no creen a la víctima, bien porque se protegen de las consecuencias, bien porque lo que quieren es proteger su inversión. La ficción deja claro, incluso, que hasta hace bien poco que un entrenador se acostara con su deportista de 16 años ni siquiera era un delito en Reino Unido.

Y ante esa realidad, chocan también la desconfianza de la familia y las amistades. Todo ello contribuye a que la víctima se culpabilice de lo sucedido y se vea totalmente sola y aislada, algo que la ficción, que juega a despistar al espectador en los primeros compases, describe con acierto. La llegada de Luisa (Maria Almeida), una joven jugadora desde Orlando, podría abrir una nueva oportunidad para desenmascarar al entrenador.

Con una fotografía normalita -aunque sean algo secundario, los partidos de tenis están terriblemente grabados-, 'Golpe de revés' acierta a la hora de describir la vulnerabilidad por la que pasa una víctima de abusos y dejar claro que una víctima es una víctima, sea su comportamiento perfecto o no, y cuando dibuja el escenario elitista y privilegiado de una academia de tenis, pero su guion se acerca al ridículo cuando narra las pesquisas para tratar de parar al entrenador -la forma en la que Justine accede al móvil de Luisa o la manera en la que la esposa del entrenador conoce a la joven de 16 años es tristísima-.

'Golpe de revés' desarrolla, además, otros temas a lo largo de sus seis episodios: desde el nivel de exigencia a un deportista de alto rendimiento al vacío que se abre cuando una estrella debe dejar su carrera forzosamente, pasando por la ausencia de la figura paterna o la rivalidad deportiva. En definitiva, con sus problemas, la ficción se deja ver y mantiene el interés durante casi toda la narración.