Paulina Rubio, como un huracán

La expectación se masticaba, todas las miradas se dirigían hacia la puerta, la gente miraba el reloj..., hasta que de repente los 'flashes' empezaron a brillar y todos los ojos apuntaron hacia la entrada en la que apareció Paulina Rubio. Vestida con unos bermudas de 'tweed', un chaleco masculino, unas sandalias de terciopelo negras y su inconfundible melena de leona rubia entró pisando fuerte sin saber que los responsables de su discográfica le tenían guardada una sorpresa.

Nada más aparecer le entregaron un disco de platino por las 80.000 copias que ha vendido en España de su nuevo álbum, 'Ananda', que salió a la venta el pasado 18 de septiembre. Loca de contenta, el huracán mexicano levantó el disco de platino como si se tratase de un trofeo.

Artistas como Coti, Julieta Venegas, Xabi de La Oreja de Van Gogh, Slash de Guns&Roses o Juanes han prestado su apoyo a la cantante en este disco que ha sido grabado íntegramente en su casa. «Esta circunstancia nos dio mucha libertad, nos permitía no tener horarios y, si había una buena racha, no teníamos que parar; ha sido un reflejo de todo lo que hacíamos en nuestras reuniones bohemias», explicó la diva.

Lo más difícil del disco fue encontrarle nombre. Pensaron titularlo con alguna de las canciones, o jugar con el apellido de la artista ('Rubia' fue una posibilidad que barajaron), pero eran clichés muy utilizados y los descartaron. Fue entonces cuando comprendieron que lo que buscaban lo tenían ante sus ojos. El disco se llamaría 'Ananda', nombre de la casa de Paulina y que significa «felicidad» en sánscrito.

A menudo la mexicana es el centro de críticas, pero asegura que «me ayudan a crecer y aprendo mucho de ellas». Esa humildad forma parte de la cara desconocida de una estrella que pretende mostrar su lado «más dulce», el que la gente «desconoce».

Vida privada

Volviendo la vista atrás no duda en recordar que sus comienzos fueron muy precoces. Empezó en la música con tan sólo siete años. «Esto motivó una fuerte discusión entre mis padres, pues mi madre me apoyaba pero mi padre quería que primero acabase el cole», recordó Paulina, quien dijo que ahora comprende la postura de su padre. De todas formas tiene muy claro que si no se hubiese dedicado a la música «sería una frustrada». Explicó que se ha tomado un año sabático y que ahora se encuentra en uno de sus «mejores momentos», tanto «en lo personal como en lo profesional».

Y es que su relación con Colate, que no dejó de mirarla en la presentación, va viento en popa. Paulina no dudó en confesar, bromeando, que quiere tener tres hijos, «niños y niñas, que sean rubitos y muy malcriados y que pinten las cortinas y la moqueta». La artista confesó que confía plenamente en que la ciencia «siga avanzando para poder llegar a los 90 años rodeada de nietos y ser la abuela más guapa de todas».

También desveló algo que pocos conocen. «Los recuerdos más felices de mi infancia los viví en La Coruña, allí fue donde me aficioné a los percebes; al principio me parecían 'aliens', pero ahora me encantan».