La vaca de Los Machucos no levanta cabeza

Desde el Ayuntamiento de Arredondo se avanzaba ayer que se está estudiando la posibilidad de poner vídeovigilancia al monumento mediante un sistema de baterías. A la par, se pedía la colaboración de los vecinos para denunciar, en el caso de que hayan sido testigos del ataque. «Si alguien ha visto algo que lo diga», dijo Carrascal, que apostilló que aquellos que atacan el monumento «no vienen de muy lejos».

Lo cierto es que la pobre vaca no levanta cabeza desde el día de su inauguración. A los pocos días de estrenarse le rompieron los dos cuernos, las orejas, el morro, el rabo, las ubres y una pata trasera, junto con el cartel explicativo de la escultura.

Fue el escultor Salvador García Ceballos, creador de la obra, quien la reparó en 2011, pero no duró mucho ya que al año siguiente la volvieron a destrozar. «Esta vez le han quitado el morro pero el problema es que se lo han llevado», destacó el alcalde que volverá a pedir la ayuda de Tino González Peral, un artesano de Bárcena de Cicero con raíces en Bustablado de Arredondo que, de forma totalmente altruista, acude en auxilio de la vaca para su reparación cada vez que la destrozan. «El hombre estaba disgustado cuando se lo hemos dicho y seguramente subirá a verlo para ver qué hacemos», informó ayer Carrascal. «Es un acto ruin y una vergüenza, un desprecio a nuestras costumbres», opinó. Por su parte el autor de la escultura, Salvador García Ceballos, también valoró el incidente como «una vergüenza», esperando que se pueda coger a los culpables cuanto antes. Al igual que el regidor, coincidió en que los mismos «tienen que ser de la zona».

En esta ocasión no se ha puesto denuncia, porque ya hay varias acumuladas sin resolver, debido a la dificultad de encontrar a los autores. No obstante, no se descarta instalar un sistema de cámaras con baterías para asegurar la zona. Una opción que «se está valorando», precisó.

El monumento no es sólo un homenaje a los ganaderos, es también un símbolo de unión y cultura de los pueblos que lo rodean. De hecho, la famosa vaca, que se ha hecho tristemente famosa por sus destrozos, está ubicada estratégicamente en Los Machucos, un camino que une los valles del Asón y del Miera, a través de las localidades de Bustablado (Arredondo) y Calseca, pueblo del valle del Miera perteneciente a Ruesga.