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El acceso en coche a la estación de tren de Requejada permanece cortado al tráfico seis meses después de que el Ayuntamiento de Polanco tomara esta medida ante la caída de cascotes y la aparición de una enorme grieta en la fachada de uno de los edificios de la urbanización Los Olivos, integrada por 130 viviendas. El cierre de esta vía al tráfico rodado se producía después de finalizar el plazo dado por el Consistorio a los vecinos para que resolvieran los problemas que presenta el edificio.
Los afectados vienen denunciando desde 2009 las deficiencias estructurales de un edificio cuyas viviendas, en un gran porcentaje, pertenecen a una empresa que no se hace cargo de las derramas. A esto cabe añadir que la empresa constructora ya no existe como tal, lo que dificulta la solución. Transcurridos seis meses desde el cierre del vial, los vecinos denuncian que la situación no ha cambiado y aseguran que cada vez hay más cascotes y las grietas de la fachada aumentan de tamaño. La alcaldesa, Rosa Díaz, se reunirá en los próximos días con los nuevos administradores de la comunidad y algunos vecinos para volver a analizar la situación y conocer los informes técnicos que la comunidad está redactando sobre el alcance de las obras necesarias y el presupuesto. Algunos vecinos se ven directamente afectados por la aparición de grietas y agujeros en sus viviendas. Para evitar daños personales, el Ayuntamiento también instaló una entrada alternativa a la comunidad con vallas.
Como consecuencia de las deudas de la comunidad, los afectados se han llegado a quedar sin luz en las zonas comunes y sin poder hacer uso del ascensor.
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