Arenas vuelve a apostar por una planta de biogás a partir de residuos orgánicos

El Ayuntamiento ha sacado a información pública, en el Boletín Oficial de Cantabria, la solicitud presentada por Sistemas Energéticos Sostenibles SL para la autorización de la instalación de esa planta, abriendo el trámite urbanístico y ambiental necesario, como explicó el alcalde, Pablo Gómez.

Es la segunda iniciativa de este tipo puesta en marcha en el municipio. Ya en 2021 se explicó a los vecinos la intención de poner en marcha un proyecto que partía de la recogida del residuo en los domicilios en un pequeño contenedor individualizado y su posterior traslado hasta una planta específica en la que se tratarían esos residuos en un digestor que transformaría el residuo en energía y un sustrato susceptible de aprovechamiento agronómico. La energía generada por esa comunidad revertiría en un ahorro para quienes colaborasen en el proyecto, recordó el alcalde al afirmar que se trabaja para lograr las ayudas para esa planta.

El nuevo proyecto sigue la misma línea, como dijo un alcalde, que recordó que, como había señalado para la primera planta, «gracias a este pequeño esfuerzo se consiguen varios objetivos: ahorro económico en la gestión de basuras, ahorro económico en el recibo energético, mejora en la calidad ambiental y avance en el cumplimiento de la normativa referida a la gestión de residuos y lucha contra los gases de efecto invernadero».

Ahora habrá que esperar 15 días, plazo durante el que quienes puedan resultar afectados formulen las alegaciones que estimen convenientes.

La acogida no ha sido tan favorable para las plantas de Cabezón de la Sal o Hazas de Cesto. En Cabezón el anuncio de construcción de la planta provocó la aparición de carteles contrarios a la instalación. Incluso se dio forma a la plataforma 'Stop a la instalación de una planta de biogás' que inició de forma inmediata una recogida digital de firmas para paralizar el proyecto. Según los promotores de la campaña, la planta generará «250.000 toneladas de residuos al año así como un mal olor permanente en toda la comarca» e invitaba a presentar alegaciones al plan.

En Hazas de Cesto, la noticia sobre la construcción de una planta similar en la Junta Vecinal de Praves también provocó un movimiento de rechazo de una parte de los vecinos afectados. Allí ya se han recogido ya más de 1.400 firmas en contra del proyecto.