Cartes reabrirá al tráfico la próxima semana el puente de la antigua Nacional 611

La empresa Rucecan, adjudicataria de las obras, comunicó al alcalde que las actuaciones continuarán en los laterales del puente, las extensiones que se añadirán a la antigua estructura y que servirán una para el paso de peatones y otra para ciclistas. La intención es acabar la obra completa en el plazo de un mes. La nueva iluminación y señalización del vial rematarán un proyecto «complejo tanto como esperado y necesario», dijo Agustín Molleda

El alcalde reconoció ayer que «se ha alargado un poco en el plazo», pero apuntó que se espera para la próxima semana su apertura al tráfico. Entre tanto, peatones y ciclistas ya pueden utilizar uno de los laterales para atravesar ese puente sobre el río Besaya.

Una obra «llamativa desde el punto de vista de la estética que además garantizará la seguridad de peatones y, sobre todo, ciclistas en ese punto», afirmó. De hecho, una de las extensiones será para peatones, la de la derecha en sentido Santiago, y la de la izquierda será para los ciclistas, dando continuidad al carril-bici que atraviesa de norte a sur todo el municipio.

A partir de ahí se acometerá una segunda fase que supondrá la mejora de la conexión de ese puente con el parque de La Viesca y con el barrio de la Venta, además de ampliar la continuidad del nuevo ancho del viaducto con una pequeña expropiación, adelantó.

El alcalde reconoció que «la obra ha generado molestias» pero, dijo, «en cuanto esté terminada se comprobará que se gana en seguridad y se da una imagen mejor para todo el municipio».

Hasta la semana que viene la alternativa aconsejada para el tráfico rodado seguirá siendo la Autovía de la Meseta, aprovechando las entradas y salidas en Cartes y Tanos.

La obra fue adjudicada a la empresa Rucecan en 171.530 euros y prevé una notable ampliación de la vieja plataforma, añadiendo dos amplias extensiones laterales de más de dos metros y medio de ancho que servirán de paso una para los ciclistas y otra para los peatones.

Los dos viales centrales que se esperan abrir al tráfico el próximo martes tendrán más de tres metros de ancho, con lo que prácticamente se duplica esa carretera, «garantizando una conexión segura para conductores, ciclistas y peatones», incidió el alcalde, Agustín Molleda, en las explicaciones dadas ayer sobre los plazos de la obra.