La Casa de la Juventud abandonada de Reocín tiene ya futuro como guardería

«Lo que queremos es dar el servicio de guardería municipal para facilitar la conciliación de las familias del municipio», destacó esta semana el alcalde de Reocín, Pablo Diestro. «Era el proyecto más importante que llevábamos en el programa electoral y por fin, después de lucharlo mucho vamos a poder llevarlo a cabo», incidió el regidor.

La idea que barajan desde el Consistorio es que «en septiembre» pueda estar listo para su apertura y para ocupar las 45 plazas que tendrá la guardería, a lo que se sumará también la ludoteca municipal. «Ahora tenemos la ludoteca en diferentes sedes que nos resultan pequeñas y la idea es trasladar este servicio y centralizarlo también allí», indicó la edil de Educación, Eva Cobo.

Reocín firmará un convenio con la Consejería de Educación para cofinanciar un proyecto en el que el Consistorio sufragará un 30%. Además, Diestro explicó que gracias a los fondos europeos para la puesta en marcha de las aulas de 0 a1 años, se ha podido conseguir el acuerdo que solventa el problema de abandono y continuo vandalismo que han sufrido las instalaciones ubicadas justo enfrente del IES Nueve Valles.

El proyecto ha concitado el apoyo de todos los grupos de la Corporación municipal, que han resaltado la necesidad de ofrecer un servicio de guardería en el municipio y la idoneidad del emplazamiento elegido. La iniciativa salió adelante en el pleno con los votos a favor de PRC y PP y la abstención del PSOE local, que expresó su deseo de conocer más detalles del proyecto.

La historia de la Casa de la Juventud de Reocín no es de color de rosa y forma parte de la suerte que han corrido otros grandes proyectos a nivel estatal que, una vez concebidos, resultaron tener difícil encaje para las arcas municipales o regionales por falta de definición de un uso práctico y la escasez de fondos para mantenerlos a flote después.

El edificio, un antiguo caserío, fue rehabilitado en base a varios proyectos de la Escuela Taller de Reocín y proyectado como un espacio para los más jóvenes, aunque nunca se utilizó para ello. En el mes de marzo de 2011 se inauguraban las instalaciones de la que iba a ser «la mejor y más grande Casa de la Juventud de Cantabria». Eso fue lo que dijeron los responsables políticos de ese turno de la historia local y regional, tras cortar la cinta y posar ante las cámaras.

Tras ese acto formal y una inversión que superó ampliamente los dos millones de euros, el complejo se abandonó a su suerte y ha sido pasto de los vándalos durante una década completa, hasta el punto de que tuvo que ser tapiado para evitar su deterioro. El motivo para que el majestuoso inmueble nunca fuese estrenado fue el complejo mantenimiento que requería para unas arcas municipales que entonces estaban en bancarrota. Tampoco en este tiempo se concibió un uso práctico adecuado para unas instalaciones como las que tiene el inmueble en cuestión.

Por otro lado la casona fue inaugurada en época preelectoral pero no estaba acabada del todo, ya que por dentro faltaban servicios por instalar y había espacios a medio acabar. A la par, los exteriores tampoco estaban concluidos y, con la crisis, se dejaron a medias proyectos iniciados por la Escuela Taller como el denominado 'Escenario Reocín'.

Ahora, los 750.000 euros que se suman a los 2,3 ya invertidos en el caserón servirán para acabar por fin las instalaciones, reparar las secuelas de los actos vandálicos y los continuos botellones que se celebraban en su interior, así como a acondicionar los espacios para el uso de una guardería municipal.