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La colilla de un cigarro pudo ser el origen del incendio que, en la noche del jueves, hizo arder la emblemática Casa de los Bedia de Suances, ubicada muy cerca de la playa de La Concha. Aunque la causa del fuego está sin confirmar oficialmente ( ... la Guardia Civil ha abierto diligencias para investigar los hechos) el alcalde Andrés Ruiz Moya apunta que los restos de un cigarrillo fueron los culpables de la destrucción total de «uno de los pocos edificios relevantes dentro del municipio, un lugar a conservar, con una protección ambiental que abarcaba no sólo la casa sino también la finca y su entorno».
El regidor pone en relación esa colilla con una estufa en una bombona cercana y también describe (y así ha sido confirmado por los Bomberos de Torrelavega, que trabajaron en la extinción) que el hecho de que la vivienda tuviera una estructura de madera fue clave para la rápida propagación del incendio, que se inició sobre las nueve y media de la noche. Tras darse por extinguido a las siete de la mañana, todavía se reactivó alrededor de las once y media de la mañana.
Ruiz Moya asegura que, en el momento en que se desató el incendio, había dos personas en el interior del inmueble y que fue el propietario quien intentó sofocar las llamas al principio, ayudado por una manguera que tenía en el jardín. Posteriormente, el dueño de la casa fue trasladado al Hospital de Sierrallana por haber inhalado humo.
Tras la llamada a los servicios de emergencia, colaboraron en la extinción tanto la Policía Local como los bomberos y los miembros de Protección Civil de Suances, que fueron avisados justamente cuando llegaban a sus domicilios después de una jornada realizando labores de asistencia a los vecinos, relacionadas con la situación provocada por el coronavirus. También acudió a la llamada la Guardia Civil.
Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana de Torrelavega, Pedro Pérez Noriega, encargado de la agrupación de Bomberos, ha explicado que los profesionales ya constataron al llegar que «el fuego estaba bastante extendido y con el viento del nordeste que afectaba bastante, pegando de cara». Tras derrumbarse una parte del tejado, se hizo lo que se pudo: «apagar en la medida de lo posible para que no se extendiera más». Al principio, se había atacado desde dentro y desde fuera, pero cuando la estructura empezó a derrumbarse, sólo se pudo trabajar desde el exterior.
El incendio se hizo visible enseguida desde muchos puntos de Suances debido a las grandes llamas que calcinaron buena parte del edificio. No hubo que lamentar heridos.
La Casa de los Bedia fue construida en el siglo XIX por un militar residente en Madrid que fue uno de los primeros veraneantes de Suances. Hace unos 50 años fue adquirida por el médico de Torrelavega Emilio Bedia Trueba para casa de verano. Es una de las casas emblemáticas del veraneo de Suances del siglo pasado y, como anécdota, fue la primera en disponer de una piscina en la localidad. Además, forma parte de la novela 'Puerto Escondido' de María Oruña, protagonizada por una agente de policía que vive en Suances.
Villa Marina, la casa de Oliver y Valentina, arde esta noche. En realidad, se llamaba Villa Mar y Sol, y me inspiró para crear la historia de #PuertoEscondido.
María Oruña (@maria_oruna) April 30, 2020
Qué pena. Al menos no me constan heridos. Y el fuego no se llevará la historia que soñé en este lugar. pic.twitter.com/TozzQkU6DL
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