El Ejecutivo anuncia la licitación de la segunda fase de La Pozona para verano

Así lo destacaba este jueves la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, que acudió a ver el resultado de las obras de la primera fases, junto al consejero de Fomento, Roberto Media. Las mismas han consistido en la ejecución de la escollera del abrigo del puerto, antaño ilegal, que hoy en día ha pasado a tener papeles y ser el octavo adscrito al Gobierno de Cantabria. Buruaga quiso anunciar allí, ante muchos marineros, vecinos y propietarios de embarcaciones deportivas, que el proyecto para la segunda fase «ya está prácticamente finalizado» y la obra saldrá a licitación este verano. Una actuación «integral y progresiva» para «colocar a este puerto, a la altura del resto», dijo.

Una vez terminada esta primera intervención, «para prevenir mayores deterioros y para dar refugio y más seguridad a las embarcaciones, ampliar su capacidad y preparar el camino para las próximas obras», el Gobierno de Cantabria acometerá una segunda fase, que incluye las obras de dragado necesario para garantizar la navegación de las embarcaciones, los accesos y la instalación de nuevos pantalanes.

Así, La Pozona de Miengo pasará a disponer de 90 amarres con todos los servicios necesarios, como nueva rampa, nueva acometida eléctrica y 15 torretas para suministro de agua y luz en pantalanes. También se ejecutará un aparcamiento y se mejorará el acceso rodado.

Durante su intervención, el alcalde de Miengo, Marino García, quiso destacar en su intervención el «largo camino» recorrido por los vecinos y usuarios del puerto, cuando este era ilegal. Un recorrido con «muchos sin sabores», en el que, según dijo, «hubo momentos en los que no se tuvo la seguridad de que esto se podía llevar a cabo», reflexionó, recordando las órdenes de desahucio a los propietarios de embarcaciones por parte de Costas. Por todo ello dio las gracias al Ejecutivo y a «todas las personas» que se habían implicado en el objetivo de salvar a La Pozona.

Otro de los protagonistas de la jornada fue el presidente de la Asociación La Pozona, Justo Udías, que acudió en representación a los propietarios de embarcaciones que construyeron desde la nada y, a principios de siglo, las instalaciones. Tras dar las gracias y echar la vista atrás, a 2018, cuando Costas les invitó a abandonar las instalaciones, Udías auguró que la construcción del puerto «va a ser un importante activo para la dinamización de toda la zona e impulsará el desarrollo económico y social, dando un valor añadido al Ayuntamiento de Miengo y va a prestar un servicio que hasta ahora era deficitario, en esa margen de la ría de San Martín», dijo, tras dar las gracias en nombre de los asociados.