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La Consejería de Industria, Empleo, Innovación y Comercio del Gobierno de Cantabria ha concedido a la planta de Hitachi Astemo Buelna una ayuda de un millón de euros a través de la convocatoria de concurrencia competitiva para grandes proyectos de mejora de la competitividad industrial ofertada por Sodercan.
De esta manera, el Gobierno de Cantabria hace efectivo su apoyo a la fábrica de San Felices en el desarrollo experimental de nuevas soluciones tecnológicas en el ámbito de los sistemas de freno, un proyecto con un plazo de ejecución de 18 meses que movilizará una inversión de cerca de cinco millones de euros.
Así lo ha anunciado el consejero del ramo, Eduardo Arasti, durante la visita realizada a las instalaciones de Hitachi en San Felices, acompañado por el director de la fábrica, Pablo Fernández, y el responsable del área de Creación, Innovación y Consolidación Empresarial de Sodercan, Alfredo Cuesta.
Arasti ha destacado que el sector de los componentes de automoción resulta «estratégico» para la economía de Cantabria y los proyectos de investigación y desarrollo van a ser «cruciales» para el reto adaptativo que afronta un sector que, según ha dicho, «se encuentra en un momento de rápida transformación impulsado por la necesidad de innovación tecnológica y sostenibilidad».
En ese terreno entra el proyecto de innovación presentado por la marca japonesa, que pretende, ha señalado el consejero, desarrollar nuevas soluciones tecnológicas avanzadas para la mejora de los frenos convencionales (hidráulicos y eléctricos) y la creación de un nuevo sistema de frenos inteligentes (sin sistemas hidráulicos), implementando procesos de producción altamente automatizados y eficientes para fortalecer el portafolio de productos de la empresa y garantizar su competitividad en el mercado global.
Fue el propio Pablo Fernández el que ha puesto sobre la mesa los detalles del proyecto avalado con un millón de euros por el Gobierno regional, algo que el director de la planta ha agradecido por lo que su pone de «apuesta clara» por la industria y como «firme compromiso con el desarrollo económico y social de nuestra región».
Esa inversión, ha apuntado en su encuentro con los responsables de la Consejería y Sodercan, «será clave para dotar a nuestra planta de las herramientas necesarias para afrontar los retos del sector, adaptándonos a las demandas del mercado y reforzando nuestra capacidad de ofrecer soluciones innovadoras y competitivas a nuestros clientes».
Acompañado por su joven equipo directivo, ha añadido que con iniciativas como la del Gobierno regional «no solo se impulsa la modernización de las empresas, sino que también se fortalece el tejido industrial local».
«Desde nuestra empresa, reafirmamos el compromiso de continuar contribuyendo al desarrollo de Cantabria, trabajando codo a codo con las instituciones y la comunidad, a la vez que agradecemos profundamente la confianza depositada en nosotros y asumimos con responsabilidad el reto de seguir generando valor en el sector», señaló tras la presentación de los objetivos, historia y situación de la factoría de la recta de la Agüera.
Hitachi Astemo Buelna cuenta con unas instalaciones de 18.500 metros cuadrados y una plantilla aproximada de 346 trabajadores altamente cualificados, en la que las mujeres representan un 7,51% del total de empleados.
Dentro de la oferta de la marca, uno de los mayores fabricantes de frenos para la industria del automóvil a nivel mundial, destacan tres grandes líneas de productos: sistemas de frenos convencionales, sistemas de frenos para aplicaciones eléctricas y sistemas de frenos mecatrónicos.
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