Polanco sigue demandando recursos para acabar con el problema de la okupación

Un año y dos meses después de la fecha en la que estaba previsto que la urbanización de Polanco más afectada por este problema de allanamientos -la conocida como 'G20'- dejara de estarlo, una veintena de pisos de esos tres bloques continúan habitados ilegalmente. A este balance hay que sumar otras seis viviendas de otra urbanización vecinal, que también lucha con el problema por el perfil violento y delictivo de algunos de esos inquilinos al margen de la ley.

Así lo ha confirmado la alcaldesa del municipio, Rosa Díaz, que sigue «preocupada» por resolver la situación que afecta a la convivencia local. Un problema que, junto a otros, se expuso ayer en la reunión con las fuerzas de seguridad del Estado presentes, en la que también se analizaron los índices de delitos e infracciones que, pese a lo anterior, tienen una incidencia similar a la del resto de Cantabria, algo que Díaz calificó como «bueno». Por ello, agradeció la labor que los cuerpos y fuerzas de seguridad están llevando a cabo allí.

Con respecto a la okupación y a la delincuencia que la envuelve, la alcaldesa insistió en que ese «es uno de los temas que más preocupan a los vecinos de Polanco», cuyo malestar aprovechó para trasladar a los presentes. Díaz destacó especialmente la situación del mencionado G20, donde «el lanzamiento y toma de posesión de las últimas viviendas que quedan pendientes estaba previsto para el 2 de octubre y se ha suspendido». ¿El motivo? «No sabemos muy bien por qué; Ni el Ayuntamiento ni los vecinos somos parte en el procedimiento», añadió la regidora a preguntas de El Diario Montañés.

Sobre el área donde se sitúa este foco conflictivo, Díaz lamenta que se trate de «una zona de ocio, donde también está el colegio público y el pabellón polideportivo» y explicó que ello genera problemas de convivencia entre vecinos. Con esto sobre la mesa, agradeció el trabajo diario de la Guardia Civil en este procedimiento, que se remonta a 2013.

También se trató en la reunión el tema de las entradas a domicilios y robos en estas fechas en las que «oscurece antes», una situación que, según la alcaldesa, afecta especialmente al municipio por su cercanía a la autovía.

Además de Quiñones y Díaz, a la convocatoria asistieron también el Coronel Jefe de la Guardia Civil de Cantabria, Antonio Orantos, los dos tenientes de la compañía de Torrelavega, el comandante del puesto de Polanco, y otros representantes de los distintos grupos políticos de la Corporación.