Secciones
Servicios
Destacamos
El promotor de la planta de biogás y biometano a instalar en Arenas de Iguña, Jesús Salmón, defenderá este viernes ante los vecinos las bondades de un proyecto que tiene como principal aliado un proceso cerrado de principio a fin que evitará los malos ... olores que podrían causar las 100 toneladas de estiércol que llegarán a diario a esa planta. Es una de las máximas preocupaciones de los integrantes de la plataforma SOS Biometano Iguña, junto al trasiego de camiones de ese suministro diario, algo que ha llevado a los promotores a tranquilizar a los vecinos asegurando que serán como mucho cinco los camiones que lleguen a las instalaciones cada día, cuatro con entrada de materia prima y uno con salida de digerido sólido.
Jesús Salmón ha defendido la conveniencia de la planta y la idoneidad de los terrenos elegidos para su construcción, al pasar el gasoducto de Enagás por la propia finca, lo que facilitará la evacuación del biometano directamente a la tubería de alta presión. Serán 18.000 metros cuadrados de terreno en los que se levantarán cuatro unidades digestoras de 16 metros de diámetro y seis metros de altura. Unas instalaciones que permitirán una carga cada 36 horas de 160 toneladas de nuevo sustrato, compuesto por estiércol y marro de café, a lo que en un futuro se podrían añadir algas marinas. La producción que se prevé es de unos 500 metros cúbicos a la hora de biogás. El perímetro contará con un vallado verde compuesto por cerca de un millar de árboles, que ocultarán visualmente las instalaciones.
La materia a desechar de todo ese proceso estará en torno a un 22%, fracción sólida de materia orgánica que se destinaría a una planta de compost en Alar del Rey o bien para uso particular como abono fertilizante.
La empresa responsable, Sistemas Energéticos Sostenibles, con sede en Arenas de Iguña, ha insistido en la ausencia de malos olores al contar con un circuito de trabajo cerrado. La descarga de los purines se hará con camiones cisterna y mangueras, hacia balsas techadas. El tratamiento del digerido también será en nave cerrada y en todos los casos, un soplante aspirará los gases generados dentro de esos compartimentos para introducirlos de nuevo al proceso. Además se añade un sistema de sensores para el control medioambiental, un sistema de purificación con cañones de ozono y la mineralización de residuos, algo que dota de valor añadido a la garantía de inexistencia de malos olores.
También ha explicado que en el montaje trabajarán unas 50 personas y que de los seis millones de euros presupuestados para la ejecución, el 3,5% se quedará en el Ayuntamiento de Arenas como impuesto de obras. Una vez la planta está en marcha, será necesario trabajar a tres turnos, dijo Jesús Salmón, con tres personas de mañana, tres de tarde y una de noche.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.