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La Corporación de Reocín dio el visto bueno en el último Pleno al proyecto del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) para suprimir un paso a nivel en el barrio de La Flor en Villapresente, dentro de la línea Santander con Llanes. Todos los partidos respaldaron el informe técnico que da luz verde al proyecto, un paso previo para la ejecución de los trabajos. Durante la sesión, el equipo de Gobierno (PRC-PSOE) volvió a mostrar sus discrepancias abiertas sobre el tipo de gestión (pública o privada) del proyecto de renovación del alumbrado público.
Según detalló ayer el alcalde, el regionalista Pablo Diestro, el operador ferroviario ADIF será el encargado de construir una pasarela peatonal sobre la línea Santander - Llanes y un vial, paralelo al actual, de forma que los vehículos podrán acceder al barrio La Flor sin necesidad de cruzar las vías, como ocurre ahora. «El proyecto está muy avanzado y creemos que las obras puedan iniciarse este mismo año o a principios del próximo, mejorando la seguridad tanto para peatones como para vehículos», dijo Diestro.
Los trabajos se enmarcan dentro de un Plan del Administrador Ferroviario de mejorar todo este trayecto de línea en varios de sus tramos. En el caso de Reocín está prevista otra actuación en La Veguilla.
Por otro lado, el equipo de Gobierno (PRC-PSOE) volvió a dar muestra en el Pleno de sus discrepancias con respecto a la forma de contratar la renovación integral del alumbrado de todo el municipio. Por ello, el PRC tuvo que recurrir de nuevo a la oposición (PP y Reocín Puede) para ratificar el estudio de viabilidad económico-financiero para ejecutar el proyecto.
Tras recibir el apoyo de la oposición en el Pleno -no así el de su socio del PSOE- el alcalde Pablo Diestro les agradeció el gesto y su «altura de miras para dejar aparte diferencias partidistas» porque «es un proyecto muy importante», defendió. A la par, lamentó que el PSOE continuase «en su línea de no apostar por este proyecto».
Por su parte, el portavoz del PSOE y teniente de alcalde, Mario Iglesias, aclaró que su partido había vuelto a votar en contra (ya lo hicieron así en el pleno de noviembre) porque siempre han defendido que fuese la iniciativa pública quien renovase el alumbrado «como se ha hecho en Santillana», comparó. Explicó que el proyecto tal y como se va a llevar a cabo «requiere una privatización» y, a su juicio, eso se podía evitar. No obstante, matizó que su grupo sí está de acuerdo en ejecutar finalmente el proyecto. «No estamos en contra, pensamos que es mejor eso que no hacer nada, pero defendemos otra manera de hacerlo», zanjó.
Por su parte el alcalde añadió que el próximo paso será acordar los pliegos de licitación para la concesión de los servicios de la gestión integral del alumbrado público. Su objetivo es llevarlos a aprobación a un pleno que se convoque en breve, para que «en cuatro o cinco meses los vecinos estén ya disfrutando de la mejora del alumbrado existente, también en los barrios y pueblos», concluyó.
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