Retiran la licencia de armas a un cazador que amenazó al personal del centro de salud de Los Corrales

En mayo de este año, de madrugada, un hombre se presentó en el ambulatorio Los Corrales y empezó a golpear violentamente la puerta y amenazar de muerte al personal sanitario que estaba en ese momento de guardia.

Los sanitarios se comunicaron con la Guardia Civil gracias a la aplicación Alertcops, una app que te permite contactar directamente y de forma inmediata con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. A través de la aplicación explicaron que estaban siendo amenazados de muerte y que necesitaban ayuda de forma urgente. Cuando los guardias civiles llegaron al centro de salud, tuvieron que intervenir para evitar un posible ataque a lo, y posteriormente fue trasladado al hospital de Sierrallana, donde se le atendió. Posteriormente, la Benemérita investigó al hombre por este ataque contra el personal sanitario, ya que su actuación podría ser un delito de atentado contra un agente de la autoridad, circunstancia que puede acarrear penas de prisión. Ahora, cinco meses después del sucesso, el primer paso es retirarle el permiso de armas e intervenirle su escopeta.

No es la primera vez que los sanitarios del centro médico de Los Corrales sufren una agresión. Hace tres años, el 3 de agosto de 2020 una vecina del pueblo entró en el ambulatorio, esperó su turno en la consulta y, cuando entró, se dirigió a la médica, la agarró de la ropa a la altura del pecho y le propinó una bofetada en la cara que le hizo saltar las gafas. En aquel momento, la Guardia Civil indicó que todo obedeció a que la agresora había reclamado que fuera de inmediato a su casa a atender a su madre y no le satisfizo la respuesta recibida. Se le acusó de cometer un delito de atentado en concurso con un delito leve de lesiones. El juicio se celebró en 2021 y la mujer fue condenada a seis meses de prisión -que no cumplió-, una multa de 180 euros y una indemnización de 35 euros para la médica por el día que perdió para curar sus heridas (enrojecimiento en el lado izquierdo del rostro, sin secuelas), además de pagar las costas del juicio.