El Torrebús llega a Cartes para acabar con once años de espera

«Llega después de una batalla política que ha durado once años, los que hemos tardado en dignificar el transporte público en Cartes. Por eso no tenemos nada que celebrar, porque llegamos once años tarde, y cualquiera que no entienda ese mensaje tiene un serio problema», enfatizó el regidor.

Pero lo cierto es que también reconoce que este sábado «aterrizó un sueño en Cartes, la esperadísima comarcalización, que traerá veinte subidas y bajadas a la capital del Besaya, incluyendo el transporte escolar; once los festivos y fines de semana. Por fin Cartes tendrá una comunicación pública, vía autobús, digna, mejorable seguramente, pero digna, en la que habrá que trabajar con los horarios, pero digna». Molleda fue más allá al asegurar que «así acabaremos con lo que era ya una leyenda urbana».

Han sido, recordó, «once años con mil problemas, mil manipulaciones, nos sucedió de todo, hemos hecho de todo, recogido firmas, todo en la última década para conseguir un transporte público digno y de calidad, porque somos pequeños, pero existimos, no tenemos capacidad para tener un transporte público propio, pero existimos, y no está en nuestras competencias, pero existimos y nos queremos comunicar, nos queremos mover, porque los principales servicios están en los municipios vecinos y necesitamos comunicarnos».

El alcalde también mandó un mensaje: «Si me voy a quedar con algunas cosas el día que me vaya de aquí, una de ellas será el haber conseguido, entre todos, corporaciones o consejeros que sumaron mucho o poco, algunos nada, que el Torrebús llegara a Cartes, algo que marcará un antes y un después para todos nosotros».

La primera parada de ese autobús en la villa medieval solo ha sido el primer paso. La idea es ir poco a poco extendiendo servicios, especialmente en la mejora de la movilidad, dijo el alcalde, en línea con lo que desde Reocín ya habían avanzado, su intención de extender el servicio de bicis eléctricas de Torrelavega a su municipio. Algo que por otra parte la juventud cartiega ya aprovechan cuándo y cómo pueden.

La línea –de nombre L4– ya es, en pocos días, una habitual en las agendas de los vecinos de Santiago y Cartes. La ruta empieza y acaba en el polígono de Mies de Molladar, dando servicio a cientos de trabajadores de una de las áreas industriales con mayor densidad de empleados. La siguientes paradas son en la arteria principal, a la altura de la iglesia de Cartes y el puente de conexión con Santiago, localidad en la que para también a la altura de La Cruz.

En cuanto a horarios, muy abundantes. Salidas de Molladar desde las ocho menos cuarto de la mañana a las diez y media de la noche de lunes a sábados; y los domingos y festivos, de la parada a la altura de la iglesia de Cartes desde las nueve y veinte de la mañana a las ocho y cuarto de la tarde. La línea parte del barrio de la Hoz en Viérnoles, pasa por Torrelavega y llega a Cartes un poco más de media hora más tarde.

Sin duda uno de los alicientes principales para la población cartiega es contar con una conexión directa con la capital del Besaya, donde hacen ya buena parte de las compras. Y en un municipio en el que la población menor de 18 años supera de largo los mil habitantes, se convertirá en un servicio muy utilizado para los alumnos y para el ocio. Aunque la estrella, como destino, será el Hospital Sierrallana.

El proceso de comarcalización del Torrebús, que se inició en Polanco, llegó también a Reocín el 11 de septiembre. Tras estos tres meses y medio, se han contabilizado entre 120 y 150 viajes realizados dentro del término municipal, una afluencia que según el concejal de eficiencia energética y movilidad, Manuel del Campo, se espera que vaya aumentando a medida que el servicio se asiente. «Al principio, en Torrelavega también costó que la gente se acostumbrara y se veían pocos viajeros», recuerda. Así, señala que para que el servicio será más completo, se prevé aumentar la frecuencia aprovechando el autobús que viene de Comillas.

Tras varios meses de espera, cuando entró en funcionamiento el Torrebús en Reocín, lo hizo con las líneas circulares 5 y 6, que se prolongaron varios kilómetros para realizar ocho recorridos diarios por la capital, Puente San Miguel, con paradas en los barrios de La Robleda y La Soloba. Los autobuses rojos aprovechan el descanso que antes hacían en el Hospital Sierrallana para llevar a cabo este nuevo servicio, de apenas diez minutos.

En el caso de Polanco, se inició el servicio en 2021, y este pasado sábado han entrado en vigor los nuevos horarios, que desde este Ayuntamiento han reclamado rectificar al vecino de Torrelavega. De hecho, la alcaldesa, Rosa Díaz, ha avisado de que, de lo contrario, el convenio será denunciado por «incumplimiento unilateral». Considera la regidora que se están perjudicando los intereses de los vecinos. Se trata de la línea L2 Polanco Nueva-Ciudad, que incluye la ampliación del Torrebús a los barrios de Soña y Rumoroso, pero cuyos horarios son «peores que los actuales».

Por su parte, desde Santillana también se trabaja por contar con el servicio del Torrebús.