Dos detenidos por la violación grupal a una menor en Camargo hace seis años

La Guardia Civil de Cantabria ha conseguido detener a dos de los presuntos autores de una violación grupal a una menor ocurrida hace seis años en las fiestas de El Carmen, en Revilla de Camargo. El tercer implicado en los hechos también está plenamente identificado y se sabe dónde está, y aunque todavía queda pendiente su detención ya se puede cerrar el duro episodio denunciado por la víctima en 2015, cuando tenía 16 años. El insituto armado puso entonces en marcha la llamada operación 'Fez' y ha conseguido llegar ahora hasta estos dos hombres, de 26 y 29 años de edad. Uno estaba preso en la cárcel de Mansilla de Las Mulas (León) y el otro, residiendo en Martos (Jaén). En cuanto al paradero del tercero, está cumpliendo condena en una cárcel de Marruecos por un delito contra la salud pública. Ninguno de los tres es de nacionalidad española ni tenían relación alguna con víctima.

Todo ocurrió sobre las dos de la madrugada del 16 de julio de 2015. La menor, vecina de Santander, se había desplazado hasta Revilla de Camargo para participar en la fiesta, donde se encontró con un amigo, con el que mantuvo relaciones sexuales «consentidas», según declaró ella misma al ir a denunciar los hechos al día siguiente, acompañada por su padre, en la Guardia Civil de Camargo. Contó que instantes después, otros tres jóvenes, presumiblemente conocidos del anterior, se habrían acercado al lugar donde se encontraban, cerca del cementerio de Muriedas, y la habrían forzado sexualmente. La violaron a solo unos 500 metros de la zona en la que se congregaban cientos de personas en la verbena, en la campa de la fiesta, y próximo también a la carretera N-623 por la que llegaban los peregrinos. Pero era un espacio apartado y sin edificaciones próximas. Nadie vio nada.

A raíz de la denuncia de la joven, especialistas en delitos contra las personas de la Guardia Civil de Cantabria abrieron diferentes líneas de investigación para intentar averiguar la identidad de los tres autores de la violación, que podían haber abandonado la región. Se supo enseguida que no tenían ninguna vinculación en Cantabria, ni personal ni familiar.

Durante estos casi seis años los guardias civiles han continuado con las pesquisas. «Nunca lo hemos dejado en el olvido a pesar del tiempo transcurrido», ha contado esta mañana el coronel jefe de la Guardia Civil en Cantabria, Luis del Castillo, que ha detallado que todo pudo dar un giro hace unos dos meses, cuando surgió una nueva línea de investigación. En ella se situaba a uno de los presuntos autores en el Centro Penitenciario de Mansillas de las Mulas (León). A partir de ahí, se pudo conocer el entorno de amistades con las que se relacionaba cuando residía en Cantabria y, dentro de ese entorno, las identidades de otros dos hombres, que podían coincidir con las descripciones aportadas por la víctima.

La investigación sobre los anteriores centró a uno de ellos en la localidad de Martos (Jaén), donde estaba llevando una vida «normal, podría decirse así», ha dicho el coronel jefe. Hasta esta población se desplazaron los guardias civiles desde Cantabria.

Contando con el apoyo de agentes de Martos, el día 11 de marzo se procedió a la detención de uno de los presuntos autores de la agresión sexual, de 26 años, trasladándolo hasta Cantabria para su puesta a disposición judicial.

El mismo día 11 de marzo, y en la prisión de Mansilla de las Mulas, los guardias civiles de Cantabria procedieron a la detención de otro de los presuntos autores, de 29 años, quedando en la citada prisión y a disposición judicial.

Por lo que respecta al detenido en la localidad de Martos, tras ser puesto a disposición judicial en Santander, el día 12 de marzo, se decretó su ingreso en prisión.

El coronel jefe ha indicado, también, que en 2015 los tres presuntos violadores estaban en Cantabria «pero era una estancia circunstancial». Después de ocurrir los hechos, los tres salieron de la región, «por eso se complicaron bastante las investigaciones».