El relevo a los 30 años de las dependencias de La Vidriera está cada vez más cerca. Será poco a poco, eso sí. Bolado también ha avanzado que una parte de los libros se trasladarán desde la antigua ubicación de cara a su inauguración. El resto de material bibliográfico, sin embargo, «se va a ir haciendo progresivamente para que los vecinos puedan ir haciendo uso de las salas», como ha subrayado, antes de recordar que el retraso de la apertura, prevista inicialmente para primavera, se ha visto retrasada por la crisis sanitaria -la adjudicataria Sercosán tuvo que detener su actividad durante unas semanas-.
Remodelación del edificio
El edificio que alberga la nueva biblioteca, en su momento las antiguas oficinas de la empresa Cros, ha sido redistribuido y repensó con respecto a su diseño original. La remodelación, que han costado 565.000 euros mediante financiación del Ayuntamiento de Camargo y del Gobierno de Cantabria, se traduce ahora en una planta baja con zona de Biblioteca, de trabajo para el personal, almacén, un área polivalente con puertas correderas y diferentes salas específicas (de estudio, de lectura, específica para niños, para lectura de prensa). Ya en el primer piso, al que se podrá subir por ascensor o por las escaleras interiores, los usuarios podrán disfrutar de un área de lectura y sala de estudio diáfana abierta las 24 horas del día, o de un espacio de descanso en terraza con cubierta y acristalamiento.
Al margen de la disposición de las salas, las nuevas dependencias contarán con un sistema de control tecnológico inteligente para ajustar el encendido de la iluminación a la ocupación real de las diferentes estancias, así como un sistema de regulación que optimiza el aprovechamiento de la luz natural, sistemas de climatización y renovación de aire, y suelo radiante.
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