El Pendo, un espacio de formación para los guías de arte prehistórico

Ahí es donde entra El Pendo, cuyos yacimientos, pinturas de hace 20.000 años y evidencias de vida neandertal valen no sólo el reconocimiento por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad sino su peso en oro como una biblioteca natural de la historia de la humanidad. Lo comprobaron en primera persona los grupos organizados en el marco de esta cita el pasado viernes, día en el que conocieron en profundidad todo el erario prehistórico que Camargo –y, con este, Cantabria– puede ofrecer al panorama internacional.

La guarida escobesa le va como un guante a este seminario, centrado en actualizar los conocimientos de los profesionales que gestionan los destinos rupestres y de aquellos vinculados con la cultura y el turismo en las zonas donde, como ocurre en Camargo, el arte rupestre puede ser un activo de desarrollo económico fundamental.

Impulsar la capacitación profesional, formar en detalle a los mejores guías del sector, enriquecer las visitas, organizar talleres, conferencias, mesas redondas... Con este tipo de cursos, el turismo prehistórico está empeñado en enfatizar la riqueza del erario rupestre en Cantabria y, en añadido, difundir el valor añadido que representa pertenecer a la lista de Patrimonio Mundial y al Programa de Itinerarios Culturales del Consejo de Europa.

Las visitas al Museo Altamira y al Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (Mupac), convocadas también la semana pasada, demostraron la misma vocación divulgativa y promotora de este encuentro, coordinado en colaboración con el Ministerio de Cultura, la Dirección General de Patrimonio, la consejería de Universidades, Igualdad, Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria, la Asociación para la Promoción y el Desarrollo de los Valles Pasiegos y también de la Asociación Internacional Caminos de Arte Rupestre.