Las carrozas de San Mateo comienzan a tomar forma

Son las siete de la tarde y hace un calor de justicia en el Ferial de Reinosa, un punto de encuentro para las peñas que organizan desde hace décadas el desfile de carrozas artísticas. Junto a uno de los carros varios jóvenes -con edades comprendidas entre los 15 y 18 años- escuchan las explicaciones de un veterano carrocista, Adrían Fernández. Su labor es enseñarles a construir una carroza desde el esqueleto hasta la última pincelada. Han elegido las figuras de los famosos personajes de Universal, Los Minions.

Pedro, Mario, Idoya, Lidia, María y Daniel, junto a otros chicos de su edad, han visto la necesidad de arrimar el hombro en esta edición y han montado su propia peña (Enlokeci2) para participar en el certamen. «Lo hacemos un poco por tradición y para ver si el año que viene se animan más amigos», explican dos de las chicas. Reconocen que la pandemia ha robado materia prima para la fiesta entre los chavales de su edad, pero quieren continuar con una costumbre heredada. Allí, en el recinto no solo aprenderán a «coser, echar yeso, tallar...», sino que tendrán la oportunidad de aprender un poco de muchos oficios, trabajar en equipo y reforzar su amistad haciendo cuadrilla.

«Se hace peña y hay ratos de diversión», explican los más veteranos que han pasado por ello. En los jóvenes está puesta la esperanza para que la fiesta mantenga su esencia y vuelva a brillar. «Esta edición está ya garantizada», afirma Héctor Sosa presidente de la Federación de Peñas de San Mateo. «Ya hay cinco carrozas» que desfilarán. La de los Enlokeci2, la de la peña Detroit -que cumple cincuenta años este San Mateo-, otra de una peña llamada Los Indiscretos (que hará la carroza de los Pitufos), la fantasía de la Reina y otra construcción más que realizará fuera de concurso la Federación de Peñas. También esperan que estos días se apunten algunos más, ya que hay 30.000 euros en premios e incentivos para los nuevos carrocistas, a los que se aporta todo el material desde la Federación y el Ayuntamiento.

Junto a los jóvenes hay ese día en el Ferial toda una familia de veteranos, padres e hijos construyendo la carroza de la peña Detroit. Este año es especial para José Luis Marcos, uno de los peñistas y carrocistas más veteranos (67 años). Es una enciclopedia andante en cuanto a números se refiere. «La primera carroza la hicimos en el 74 y nosostros como peña la montamos ya siendo unos críos», explica. Este año cumplen cincuenta años de trabajo en equipo ininterrumpido y eso también lo traduce Marcos en cifras. «Hemos organizado 41 cabalgatas, presentado a concurso 18 carrozas, hemos tenido 39 reinas y damas. Tambiénn hemos sido pioneros en la organización del Triatlón Blanco y en los concursos de ollas ferroviarias», resume. Su hija, Mariola Marcos (26 años), también siente la pasión por la tradición carrocista y de las peñas. «Este año vamos a vivir algo importante como es cumplir cincuenta años y seguir viviendo la tradición». En su caso, es una cuestión casi familiar, pero explica que pertenecer a una peña y hacer una carroza es, más allá de vínculos, algo especial. «Son momentos para pasarlo bien y estar entre amigos. El día de las carrozas no te lo pasas igual sino haces una porque está la ilusión de participar y ver si te llevas el premio».