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La localidad en la comarca de Campoo contarán en los próximos meses con una nueva fábrica alimentaria, con la que sus responsables tienen la previsión, a medio plazo, de crear dos centenares de puestos de trabajo en Cantabria. El Polígono de la Vega, en concreto ... las naves que ocupó la desaparecida conservera Anchoas y Productos del Cantábrico SL, acogerá el nuevo proyecto de Clavo Food Factory, una empresa familiar, cuyos orígenes se remontan a hace algo más de tres décadas y que en la actualidad dispone de sendas fábricas en Caldas de Reis (Pontevedra) y en Tordesillas (Valladolid), donde ocupan a 400 profesionales. Entre sus especialidades alimenticias están los congelados, los refrigerados, las conservas y las elaboraciones denominadas 'de quinta gama' (listas para consumir). La parcela en la que se instalará se ubica de forma mayoritaria (93%) en terrenos de Campo de Enmedio y el resto en Reinosa.
La empresa que fundaron en Caldas de Reis a mediados de los ochenta Emilio Clavo, Nicolás Lara, Ignacio Losada y Emilio José Clavo, todos ellos originarios de Zamora y unidos por lazos familiares, y que facturó el año pasado unos 50 millones de euros, ha puesto su mirada en Campoo, ya que ha visto una oportunidad en las instalaciones que utilizó anteriormente otra empresa agroalimentaria. Esta circunstancia facilitará una más rápida puesta en marcha de los procesos fabriles, que previsiblemente pondrán el foco en elaboraciones cárnicas. El primer paso de los directivos de Clavo Food Factory ha sido adquirir las naves, solicitar los oportunos permisos y recabar información sobre la posibilidad de acceder a ayudas institucionales por la iniciativa y creación de empleo.
En 2020, esta empresa adquirió el 20% de Boreal Artik (antigua Nord King), una fábrica en Laredo dedicada a la tecnología de altas presiones para productos de pescado refrigerado.
50millones de euros facturó el pasado año Clavo Food Factory. En 2019, antes de la pandemia, el balance estuvo en unas ventas de 45 millones
400es el número de empleados que actualmente tiene la empresa trabajando en sus dos factorías de Caldas de Reis y Tordesillas
La empresa que nació como Clavo Congelados y que con el tiempo ha pasado a denominarse Clavo Food Factory, pensando en los mercados internacionales en los que ya comercializa sus productos, ha preferido contar con una tercera planta fabril que sobredimensionar las instalaciones que tienen en Galicia (con 300 trabajadores) y Castilla y León (con 100).
Esta multiplicación de sedes es paralela al crecimiento y diversificación en la elaboración de productos; lo que empezó en 1985 como una fábrica para transformación de pescados se ha convertido es dos factorías de alimentación -la de Valladolid desde 1993- con un ambicioso catálogo de referencias, por encima del millar. De promedio, cada año lanza al mercado unas 50 referencias nuevas fruto de un espíritu de innovación. Sus productos están basados en pescados, carnes, masas y hojaldres, entre otros.
Su principal cliente es el canal horeca (hoteles, restaurantes y cafeterías), cifrándose en más de 42.000 restaurantes en todo el mundo donde se consumen sus productos. Clavo Food Factory se ha convertido en una de las firmas españolas punteras en la producción de alimentos siendo partner de casi todas las grandes cadenas de restaurantes.
1.000es el número de referencias que se elaboran actualmente en las dos plantas que tiene la compañía en las provincias de Pontevedra y Valladolid
42.000es la cifra de restaurantes en todo el mundo donde están presentes las elaboraciones que realiza la empresa Clavo Food Factory
Nicolás Lara, CEO y miembro del equipo fundador de la compañía, que ha salido reforzada de la pandemia por el perfil de su negocio, destacaba recientemente en Cinco Días que en la actualidad la empresa sigue teniendo «el foco puesto en consolidar nuestra ventaja competitiva, en ser una industria versátil, dinámica y a la vanguardia de la innovación alimentaria».
Entre las últimas novedades que Clavo Food Factory ha implementado y con las que quiere seguir creciendo están Dona Dona, una compañía especializada en la distribución de alimentos ultracongelados a domicilio; Roots Mindfoodness, una startup dedicada a la innovación en el ámbito de la alimentación infantil que ofrece una solución adaptada a las necesidades de los más pequeños: Smommys, para las etapas del embarazo y la lactancia posterior; Papis, para niños de entre seis y doce meses; y Alphys, para niños de más de un año.
Clavo Food Factory produce más de 600 toneladas al mes de alimentos en la factoría de Caldas de Reis y más de 400 en la de Tordesillas y para ello cuentan con una sofisticada y moderna maquinaria para dar contenido a varias líneas de producción paralelas, con túneles de ultracongelación, amasadoras, freidoras, hornos, embutidoras, envasadoras e incluso un túnel de nitrógeno. Mientras que en la planta gallega se han especializado en productos con ingredientes del mar, en la castellana han desarrollado líneas de trabajo más centradas en los elaborados de tipo prefritos, empanados, horneados, masas. Y, a pesar de que en la actualidad Clavo ya elabora cuatro millones de kilos anualmente de productos cárnicos, una de los factores que han favorecido la instalación en Cantabria es la posibilidad de crecer en este sector gracias a la proximidad de materia prima de calidad. De cumplirse la expectativas, la ganadería de Cantabria y la IGP Carne de Cantabria tienen una oportunidad de crecer.
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