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La alta velocidad avanza lenta por Cantabria desde 2003 sobre una vía llena de obstáculos. Casi dos décadas después de que el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, fuera con el proyecto bajo el brazo al Palacio de La Moncloa y convirtiera en ese momento la ... conexión con Madrid en una de las principales reivindicaciones de la comunidad autónoma con el Estado y en caballo de batalla en todas las contiendas electorales, la línea de AVE llamada a comunicar Santander con la capital en 2 horas y 50 minutos sigue sin ser una realidad. Por lo menos parte de ella. La que transita por tierras cántabras, porque a día de hoy acaba en Palencia. Faltan 200 kilómetros fundamentales hasta la costa, los más complicados técnicamente. Los que consumen la mayor parte del tiempo de trayecto, que ahora, en función del tipo de tren y las paradas, requiere entre cuatro y cinco horas de viaje. Son también los que concentran las frecuentes averías que obligan a hacer transbordos y desplazar a los pasajeros por carretera. Otro de los motivos para acometer el proyecto.
En estos 20 años hay tantos pequeños hitos y declaraciones bienintencionadas por parte de los distintos responsables de Fomento -del popular Francisco Álvarez Cascos hasta el actual, el socialista José Luis Ábalos- como páginas escritas sobre el asunto. Promesas, borradores de proyectos, pasos administrativos, infografías, proyecciones a futuro, estimaciones de plazos incumplidos, actos con alcaldes... El último de estos momentos destacados que ha merecido un titular es el acuerdo entre la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el presidente autonómico para iniciar ya en 2021 la primera de las dos partes que faltan del AVE Palencia-Reinosa: dos de los cuatro tramos entre la capital castellana y Alar del Rey, que tienen un coste total de 940 millones de euros, según la última estimación que hizo Ábalos. Sin contar la duplicación de la vía entre Santander y Torrelavega y las mejoras hasta Reinosa -aquí va un tren de altas prestaciones, no un AVE por las complicaciones que presenta la orografía y el coste económico que tendría-, aún faltan por añadir otros 800 millones de euros del tramo entre Alar del Rey y la capital campurriana.
En total suman 1.740 millones de euros, frente a los 265 que únicamente ha comprometido el Estado en los Presupuestos de 2021 y en las partidas plurianuales que avanza de cara a 2022 y 2023. Es decir, que la Administradora de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), la empresa pública encargada de los trabajos, a día de hoy -después puede haber más aportaciones adicionales - tiene garantizado el 15% del dinero que costará el proyecto de la alta velocidad entre Palencia y Reinosa.
lento y averías constantes
LOS CÁLCULOS DEL MINISTRO
2003es el año en el que comenzó la reivindicación de un AVE que conectara con Madrid, con Revilla como presidente regional y Aznar en Moncloa
Inicialmente, según el primer borrador, era menos. En concreto, sumaban 89 millones de euros en tres años, un montante que será mejorado gracias a una enmienda conjunta que impulsan PSOE y PRC. «Conozco otras aspiraciones que ustedes han manifestado verbalmente, especialmente, las obras del AVE entre Palencia y Reinosa. Tiene nuestra mano tendida para que durante la tramitación de este proyecto de presupuestos podamos acordar esa enmienda en esta cuestión o en cualquier otra, que nos permita que ustedes, finalmente, puedan aceptar estos Presupuestos y puedan votarlo favorablemente», respondía la ministra Montero la pasada semana al regionalista José María Mazón, uno de los impulsores de estas enmiendas junto al diputado socialista Pedro Casares. En concreto, el compromiso del Ministerio es que el año que viene estén en marcha las máquinas en los dos primeros subtramos del tramo entre Palencia y Alar del Rey. Se trata del Palencia-Amusco (20,79 kilómetros), que como los dos últimos está en exposición pública desde julio de 2019 a la espera de licitación para ser adjudicado, y el Amusco-Osorno (21,9 km), que está más avanzado y cuya adjudicación está ya pendiente de resolverse.
Ahí tendrán que invertirse, de los 265 millones previstos para los próximos tres años, los primeros 24 millones, comprometidos ya para 2021. Zacarías Grande, exprofesor de la Escuela de Caminos de la Universidad de Cantabria y uno de los ingenieros que realizó el proyecto encargado a la universidad, recuerda que cada kilómetro de AVE cuesta alrededor de 5 millones de euros. «Por los trámites que se han hecho, los trabajos, si se inician en 2021, será a finales de ese año. Con ese dinero se podrá poco menos que llegar a las afueras de Palencia», insiste. En cualquier caso, considera muy positivos los pasos dados y el dinero comprometido en un momento en el que las inversiones ferroviarias se centran más en la mejora de vías existentes como en vías nuevas, por lo que este caso es una de las pocas excepciones en toda España. Además, considera que con estos avances es ya muy improbable que el Estado abandone la obra como ocurrió en 2010 por la crisis económica. Revilla, que organizó un acto de propuesta multitudinario en la localidad de Monzón de Campos, todavía no ha perdonado aquello al entonces ministro, José Blanco.
Grande apunta que cuando esté terminado el tramo Palencia-Alar el ahorro en tiempo será todavía muy pequeño, «no más de 10 minutos», aunque permitirá tener dos vías distintas y aumentar el tráfico de mercancías utilizando una de ellas, otro de los objetivos. Donde se ahorrará más tiempo es en los tramos Alar del Rey-Reinosa (también de AVE) y sobre todo Reinosa-Santander (no AVE, sino altas prestaciones en un trazado que ahora se hace en hora y 40 minutos de media), pero esta parte está muy retrasada. De hecho, considera imposible que todo el proyecto esté hecho en 2024, como dijo Ábalos desde Santander el pasado año.
Palencia-Amusco
Distancia: El primer subtramo del tramo Palencia-Alar del Rey se inicia en la capital castellana y llega hasta el municipio de Amusco. En total, suma 20,79 kilómetros, según los planos.
Estado: Salió a información pública en julio de 2019 y está pendiente de licitarse para su posterior adjudicación. Se prevé que las obras estén en funcionamiento ya en 2021, tal y como señaló el Ministerio de Hacienda, tras el acuerdo con el presidente regional, Miguel Ángel Revilla.
Presupuesto: No está detallado el coste de este subtramo, que implica un gran número de expropiaciones.
Amusco-Osorno
Distancia: 21,9 kilómetros
Estado: Es el único subtramo que ha salido a licitación (en diciembre de 2019) y su adjudicación se ha retrasado debido a la pandemia. Junto al anterior, es donde tiene que haber máquinas en funcionamiento ya el año que viene. A partir de ese momento, la obra tiene un plazo de ejecución de 40 meses.
Presupuesto: Salió a licitación por 104 millones de euros y un plazo de ejecución de 40 meses. Es casi la mitad de lo que hay previsto (están presupuestados 265 millones) de aquí hasta 2023 para todo el tramo entre Palencia y Alar del Rey.
Osorno-Calahorra de Boedo
Distancia: Es el tercer subtramo del tramo entre Palencia y Alar del Rey. Consta de cerca de 23 kilómetros.
Estado: Al contrario que en los dos anteriores, aquí no hay fecha para el inicio de las obras. Salió a información pública en verano de 2019 y desde entonces no ha habido más noticias.
Presupuesto: El Ministerio de Transportes y Movilidad Urbana tampoco ha confirmado el presupuesto que tendrá este subtramo, uno de los cuatro que conforman todo el tramo, que en su conjunto tendrá un coste aproximado de unos 940 millones de euros.
Calahorra de Boedo-Alar del Rey
Distancia: De los cuatro subtramos proyectados en la obra hasta Alar del Rey, es el más corto, con cerca de 13 kilómetros.
Estado: Como el primero y el tercero, salió a información pública a efectos de expropiaciones en julio de 2019 y desde entonces no se han realizado nuevos avances administrativos. Tampoco hay fecha prevista para el inicio de las obras. Presupuesto: Todavía no se conoce cuánto de los 940 millones de euros que costará todo el tramo entre Palencia y Alar del Rey se destinará concretamente a este subtramo.
Presupuesto: Todavía no se conoce cuánto de los 940 millones de euros que costará todo el tramo entre Palencia y Alar del Rey se destinará concretamente a este subtramo.
Alar del Rey-Reinosa
Distancia: 43 kilómetros.
Estado: Salió a información pública en septiembre de este año y aún está sin licitar. De hecho, todavía no se ha concretado cuáles de las distintas alternativas se harán en los subtramos Nogales de Pisuerga-Mataporquera y Mataporquera-Reinosa.
Presupuesto: Según el proyecto que presentó el exministro Íñigo de la Serna en Reinosa, el presupuesto estimado era de 460 millones de euros. En la última revisión se ha aumentado hasta los 800 millones, tal y como aparece en el documento que salió a información pública hace dos meses.
Reinosa-Santander
Distancia: Cerca de 65 km.
Estado: Los trabajos se vienen haciendo desde hace tiempo, de forma puntual en distintos subproyectos. Consisten tanto en la duplicación de la vía entre Santander y Torrelavega como en la mejora del trazado actual entre Torrelavega y Reinosa, donde el tren avanza ahora más lento por las características del terreno y el mal estado de la infraestructura.
Presupuesto: La renovación de la vía suma 223 millones de euros y la duplicación entre Santander y Torrelavega (otros 191 millones, incluidos 70 millones para pantallas antirruido).
Nada más saber que Pedro Sánchez permitiría a las comunidades autónomas proponer proyectos propios para que pudieran optar a los fondos del Plan Europeo de Reconstrucción que se está desarrollado para paliar los efectos de la pandemia, el Gobierno de Cantabria puso sobre la mesa dos prioridades: el centro logístico de La Pasiega y la alta velocidad, especialmente la que tendrá que conectar Santander y Bilbao. Finalmente, sólo la primera de estas opciones está en el documento que el bipartito ha enviado a La Moncloa. No introdujo el AVE por su escasa viabilidad teniendo en cuenta que uno de los requisitos que exige Bruselas es que las actuaciones estén acabadas antes de cuatro años. Imposible teniendo en cuenta que, en este caso, todavía se está empezando a elaborar el borrador del proyecto.
Las últimas conversaciones con el Gobierno central abren alguna puerta sobre la posibilidad de que parte del dinero europeo pague algo de las obras de la alta velocidad que Cantabria reclama al Estado. Más después de escuchar recientemente en el Congreso de los Diputados a la presidenta de la Administradora de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), dependiente del Ministerio, que considera que los fondos de la UE pueden impulsar algunos de los tramos que sobre el papel están más avanzados. Aunque no hizo referencias concretas, quizás es complicado que lleguen al tren a Bilbao, pero sí para el que conectará con Palencia y Madrid.
Según Isabel Pardo de Vera, ADIF cuenta con muchos proyectos muy avanzados en cartera relacionados con la alta velocidad que se ajustan a las directrices comunitarias. «Espero que no dejemos pasar la oportunidad de presentar estos proyectos que están maduros y son candidatos para impulsar la reforma en un marco verde y digital y para la mejora de la competitividad», señaló en su comparecencia en las Cortes el pasado mes de octubre.
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